Los ‘millennials’ son los jóvenes nacidos a partir de los 80 y son una generación digital, hiperconectada y que por lo general poseen altos valores sociales y éticos, pero, ¿por qué esta generación no se quiere casar?.
Un informe del Pew Research Center; centro de datos no partidista que informa al público sobre problemas, tendencias sociales y da a conocer investigaciones de ciencias sociales basadas en datos; señala que los millennials son la generación más lenta para establecer sus propios hogares, y asegura que más de 4 de cada 10 personas de este sector no tienen una familia propia.
De acuerdo con el informe aunque los millennials no quieran casarse, el vivir con sus parejas sí es una práctica común, y es mucho más frecuente que en generaciones pasadas.
Una publicación reciente de la Universidad de Bentley, Estados Unidos, retomó el tema y explica por qué los millennials se niegan a casarse. De acuerdo con la prestigiosa universidad los millennials están haciendo historia al decir que no al matrimonio y podrían cambiar radicalmente la institución de esta tradición del amor.
Clarissa Sawyer, profesora de Ciencias Naturales y Aplicadas que enseña psicología de género y desarrollo y envejecimiento de adultos en la Universidad de Bentley, señala que esta tendencia entre los millennials tiene su origen en sus raíces en la educación: “Las mujeres de todo el mundo se casan más tarde y parte de eso se debe a que las mujeres están recibiendo más educación e invirtiendo en sus carreras. Han invertido mucho tiempo y dinero en la universidad, por lo que están consiguiendo un trabajo y retrasando el matrimonio, si no optando por no hacerlo por completo”.
Pew Research Center informó que los millennials con una licenciatura o más, se cansa a un ritmo más alto que aquellos con menos educación pero, por lo general, viven sin hijos.
De acuerdo con el columnista del Boston Globe, Tom Keane, esta tendencia de no contraer matrimonio podría ser motivo de alarma: “No casarse en absoluto podría resultar trágico”, ya que asegura que los beneficios sociales, legales y económicos de casarse son muchos.
De acuerdo con Steven Martin, Asociado de investigación de Urban Institute, el que los millennials no se casen puede traerles consecuencias a largo plazo. En su investigación “Menos matrimonios, más divergencia: Proyecciones de matrimonio para millennials hasta los 40 años”, asegura que las tasas impositivas, la elegibilidad para programas de derecho y la disponibilidad de redes de seguridad social se ven altamente afectadas por el estado civil.
De acuerdo con Sawyer los millennials no se quieren casar por miedo al divorcio: “Casarse a menudo se percibe como un riesgo, por lo que los Millennials tienden a vivir juntos y estabilizarse financieramente antes de seguir adelante”.
El informe de Pew Research Center señala que los millennials ricos se casan a un ritmo más alto que sus contrapartes pobres.
Beneficios de casarse en México
En México, el Código Civil Federal, señala que una pareja casa está obligada a proveerse alimento mutuamente; asimismo, aunque no sea una obligación legal los cónyuges se pueden ofrecer seguridad social tanto en el IMSS como en el ISSSTE y también se tiene permitido asegurar a los hijos menores de edad.
Si te casas y quieres construir un patrimonio puedes acudir al Infonavit para solicitar un crédito conyugal, también pueden hacerlo en el FOVISSSTE; además, una vez que logren pagar el crédito hipotecario ofrecido por estas instituciones, las escrituras de su hogar saldrán a nombre de los dos.
Si por cualquier situación llegan a divorciarse podrían obtener mejores beneficios que los que tendrían si solo vivieran juntos. Si una mujer u hombre se dedica a la tarea del hogar y al cuidado de los hijos, y la otra parte de la pareja se dedica al trabajo, entonces a la primera le tocará una pensión equivalente a los años que vivieron de casados, la cual puede ser de hasta el 20% del salario de la persona trabajadora; incluso aunque estuvieran casados por bienes separados pero un miembro de la pareja se dedicó al hogar, este puede pedir hasta el 50% de los bienes generados durante los años de matrimonio.
En caso de que uno de los cónyuges muera sin haber dejado un testamento, la pensión es para la persona que queda viva. También el cónyuge que queda vivo puede reclamar hasta el 50 porciento de los bienes del fallecido. Pero si no tuvieron hijos y la persona no tenía más familia, entonces el que queda vivo hereda el 100 porciento.
También te puede interesar…
Si tienes una boda de ensueño es más probable que te divorcies: estudio