En Estados Unidos no toman con indiferencia el comportamiento del presidente Andrés Manuel López Obrador en los últimos días. No solamente se trata de cómo reaccionó el mandatario al reportaje sobre la vida de su hijo mayor en Hosuton, José Ramón López Beltrán; sino también a las decisiones que su gobierno y partidarios toman en asuntos determinantes para el país.
Jorge G. Castañeda, Secretario de Relaciones Exteriores de México entre el año 2000 y 2003, escribió al respecto en Nexos que grupos políticos en EE. UU. comienzan a expresar sus desacuerdos con el presidente López Obrador en temas como la suspensión en las importaciones de aguacate, la falta de acciones en la protección de la vaquita marina y, más reciente, por atacar diariamente a la prensa.
Los cuestionamientos que hizo el senador por Texas, Ted Cruz, a AMLO por impulsar las agresiones en contra de los periodistas, en las que incluso pidió la intervención de Joe Biden, es muestra, opina Castañeda, de que las relaciones entre México y Estados Unidos se fracturan.
México bajo el escrutinio de Estados Unidos
“Estadounidenses: No viajen a México”
En los últimos meses, el gobierno de AMLO es un tema (todavía más) habitual en los periódicos estadounidenses. Entre diciembre de 2021 y enero de 2022, el Departamento de Estado de EE.UU. emitió recomendaciones a sus ciudadanos para reconsiderar sus viajes a México, debido al aumento de la violencia en diversos destinos turísticos.
Los delitos violentos, como homicidios, secuestros, robos de vehículos y robos, están muy extendidos y son comunes en México. El gobierno de los EE. UU. tiene una capacidad limitada para brindar servicios de emergencia a los ciudadanos estadounidenses en muchas áreas de México, ya que los viajes de los empleados del gobierno de los EE. UU. a ciertas áreas están prohibidos o restringidos”, se lee en la última actualización vigente de la alerta.
El gobierno de Estados Unidos fue contundente con su mensaje de no viajar a México, o reconsiderar hacerlo, si se tienen planes de visitar 30 entidades del país. Las únicas que consideran medianamente seguras son Campeche y Yucatán.
Casi al mismo tiempo, los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) también pidieron a los estadounidenses reducir al máximo sus viajes a México. Esta vez, por el incremento acelerado en contagios de la variante Ómicron.
Preocupación por la Reforma Energética
Entrado 2022, la Reforma Energética planteada por el gobierno de López Obrador recibió muchos cuestionamientos de expertos en el tema y políticos estadounidenses.
The Economist aseguró en un reportaje que los cambios constitucionales planteados por AMLO son una amenaza al estado de derecho, dañarán la confianza de los inversores y, que en el mediano plazo, haría que la generación de energía fuera más sucia.
La visita a México de Jennifer Granholm, secretaria de energía de Estados Unidos, fue una oportunidad para López Obrador y Rocío Nahle de explicar a detalle los planes de trabajo de la Reforma, pero no lograron el objetivo.
El Gobierno de México dijo que la reunión había sido un éxito y que Jennifer Granholm y Rocío Nahle habían logrado entenderse. Pero a las pocas horas, un comunicado oficial sobre las impresiones de la funcionaria estadounidense dio una versión contraria:
“En mi viaje, me reuní con los más altos funcionarios de México, incluyendo el Presidente Andrés Manuel López Obrador, así como representantes de la industria, legisladores y sociedad civil para sostener diálogos francos y respetuosos. En cada reunión expresamos abiertamente las preocupaciones reales de la Administración Biden-Harris sobre el potencial impacto negativo de las reformas energéticas propuestas en México sobre la inversión estadounidense en el país. La reforma propuesta también puede dificultar los esfuerzos conjuntos de México y Estados Unidos en materia de energía limpia y clima. Debemos mantener y mejorar los mercados energéticos abiertos competitivos que benefician a América del Norte”.
“Los cárteles mexicanos son tan peligrosos como los terroristas de Medio Oriente, o hasta más”
Un video del ataque con drones bomba efectuado por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) atrajo las miradas a México de los periódicos de Estados Unidos (y de gran parte de la prensa internacional, en realidad).
La expansión de los grupos del crimen organizado preocupa tanto al gobierno de Estados Unidos, como al de Canadá, debido a los reportes de vacacionistas asesinados en destinos turísticos que solían ser seguros.
Un artículo en The New York Post equiparó las ejecuciones y ataques del CJGN con las tácticas utilizadas por grupos terroristas de al Qaeda y Talibanes en Medio Oriente. Expertos que dieron su opinión para ese texto indican que los narcos mexicanos penetraron tanto en la sociedad de las entidades en las que operan que no es de sorprender que las autoridades también estén involucradas en sus actividades criminales.
El freno a las importaciones de aguacate mexicano también tiene su origen en la violencia ejercida por los cárteles de la droga. Un comunicado del gobierno de EE. UU. señaló que uno de sus inspectores en Michoacán había sido amenazado de muerte por narcotraficantes que se disputan el territorio.
Sin embargo, el presidente López Obrador dijo públicamente que le parecía que había una conspiración detrás del veto del aguacate mexicano. Opinó que, más allá de las explicaciones de Estados Unidos, había otros intereses económicos y políticos que llevaron a este problema.
El acoso de López Obrador a los periodistas
A la fecha de publicación de este artículo, ya pasaron tres semanas desde que Latinus presentó el reportaje sobre las casas que habitó el hijo mayor del presidente Andrés Manuel López Obrador en Estados Unidos.
Desde entonces, los ataques verbales del mandatario mexicano a la prensa crítica a su gobierno ocurren prácticamente a diario y se dan en un tenso ambiente en el que varios periodistas mexicanos han sido asesinados en lo que va del sexenio.
Carlos Loret de Mola, Víctor Trujillo (en su papel como Brozo), Carmen Aristegui, Ricardo Rapahel y Ciro Gómez Leyva son algunos periodistas a los que más señalamientos hace AMLO últimamente.
Pero es con Carlos Loret de Mola a quien más ataques directos lanza. El momento crítico del conflicto ocurrió el viernes 11 de febrero cuando López Obrador exhibió a nivel nacional un documento con información sin verificar sobre los supuestos ingresos del periodista.
Este acto fue condenado tanto en México como en Estados Unidos. The Washington Post, uno de los medios en los que Loret de Mola es colaborador, publicó un comunicado en el que calificó como un abuso de poder las acciones de AMLO. Diversos medios de EE. UU. también hablaron sobre el tema.
El senador por Texas, Ted Cruz, se sumó al debate y dijo que existe un “colapso acelerado de las instituciones mexicanas” y que “el estado de derecho bajo López Obrador es una amenaza para la seguridad nacional de Estados Unidos”.
La respuesta del Gobierno de México a sus comentarios llegó a través de una carta firmada por el embajador Esteban Moctezuma, quien defendió a López Obrador y reprochó a Ted Cruz de tener una visión equivocada de México y Latinoamérica.
La relación actual entre AMLO y el periodismo es tensa. A pesar de recibir diversos llamados de instituciones nacionales e internacionales para detener el acoso a la prensa, el mandatario responde a que todos sus comentarios y acciones se respaldan bajo el derecho de réplica.
Estados Unidos se mantiene al pendiente de lo que ocurre en México y no es posible determinar si esto traerá consecuencias negativas para la bilateralidad que hay entre ambos países.
Te puede interesar: