En la Ciudad de México, varías personas han reportado ser detenidas sin una razón clara mientras transitaban por la calle.
Es por eso que te explicamos a continuación en qué situaciones sí procede una detención por parte de policías y en cuáles los derechos del ciudadano están siendo vulnerados.
La policía no puede detenerte si estás en la vía pública o al interior de tu domicilio, de acuerdo con el artículo 16 de la constitución. En él se estipula que “ningún ciudadano puede ser molestado en su persona, casa, auto o posesiones” por lo que en primera instancias, una irrupción repentina sería ilegal.
El único caso en el que pueden detener a alguien es si ha cometido un delito y fue sorprendidos en flagrancia. O bien, si hay una orden de aprehensión dictaminada por un juez a causa de un delito.
Esto significa que las autoridades deben sorprender a la persona en la comisión de algún acto ilegal para que la revisión esté fundamentada conforme a la ley.
El “protocolo de actuación policial” de la Ciudad de México, establece que los uniformados sólo podrán detener a quien haya cometido alguna infracción o delito
En otras palabras, jamás deberán arrestar a un persona sólo por una simple sospecha.
Esto quiere decir que si los policías detienen a alguien es porque lo sorprendieron in fraganti, tienen en su poder un objeto que lo vincule a un delito o pesa sobre él alguna orden de aprehensión.
Y el proceso continuará si hay una denuncia de por medio.
En estos casos, los policías que lleven a cabo la detención deben identificarse como tales y no deben cometer actos de intimidación, discriminación o tortura.