Texas, estado perteneciente a Estados Unidos, se enfrenta a niveles de hospitalización preocupantemente altos, escases de personal y menos disponibilidad de camas.
En todo el mundo los casos por Covid-19 en su variante más contagiosa, Ómicron, han ido en aumento; Texas es uno de los estados que tiene tasas de vacunación relativamente bajas, se rehúsan a usar mascarillas y a respetar las restricciones del gobierno; por lo tanto, las cosas no apuntan a una pronta mejoría.
Aunque gracias a las vacunas los síntomas provocados por el virus ahora suelen ser más leves, esta nueva variante es más transmisible, aún en personas que tienen dos dosis de la vacuna. La infecciosidad de Ómicron junto con la resistencia de los ciudadanos de Texas ha dado como resultado una crisis para el personal médico y los hospitales, lo cual pone en peligro a las personas que no están vacunadas.
Esta semana se llegaron a presentar más de 61 mil casos positivos, sin embargo, muchas personas enfermas no se hacen la prueba, por consecuencia los números podrían ser más; además las hospitalizaciones han aumentado a más de 11 mil 500.
Asimismo, las hospitalizaciones pediátricas o de niños aumentaron en un 200 por ciento a nivel nacional y ha aumentado la ocupación en un 87% de las camas de cuidados intensivos en más de 500 hospitales en Texas.
John Henderson, presidente y director ejecutivo de la Organización de Texas de Hospitales Rurales y Comunitarios, dice: “Lo ideal sería que todos se tomaran esto en serio y siguieran los pasos que sabemos que funcionan, que son principalmente vacunarse y reforzarse, pero también ser inteligentes con respecto a las reuniones y usar una mascarilla”.
También ha mencionado que las zonas rurales son las más afectadas ya que la gente ha vuelto a su “normalidad”: “El virus está a cargo y hasta que no lo controlemos, no podremos volver a la normalidad” dijo Henderson.
De acuerdo con Philip Huang, director de salud del condado de Dallas, asegura que al menos el 80 por ciento de las hospitalizaciones son casos de personas no vacunadas y asegura que la mejor defensa en contra de esta variante es tener un esquema de vacunación completo.
El Centro Médico Southwestern de la Universidad de Texas proyecta que si la población vuelve a los patrones de comportamiento descuidado, las hospitalizaciones podrían alcanzar números todavía más altos y podrían repetir la situación del pasado septiembre del 2021 en donde los hospitales estaban tan llenos que se tuvieron que colocar tiendas de campaña fuera de las instalaciones y los pacientes eran atendidos en las salas de espera; incluso el gobernador Greg Abbott se vio en la necesidad de solicitar apoyo médico de otros estados. El mandatario del estado es uno de los líderes estatales que más se opone a la vacunación y al uso de máscaras protectoras.
El Centro Médico Regional de Hereford informó que todos los casos que requieren hospitalización son porque no están vacunados e incluso han tenido que recurrir al uso de ventiladores para ayudar a la respiración.
Los funcionarios de dicho hospital han estado trabajando de la mano del estado para asegurar personal adicional y reabastecimiento de suministros de medicamentos críticos, los cuales han presentado también retrasos debido a los problemas con la cadena de suministro global.
Jeff Barnhart, director ejecutivo del Distrito Hospitalario del Condado de Deaf Smith y supervisor de Hereford, declaró: “No creo que hayamos alcanzado el pico con el aumento todavía”.
La escasez de personal médico ha sido un problema en todo el estado de Texas y esto es porque la mayoría ha dado positivo a las pruebas de Covid-19 y se encuentran en cuarentena domiciliaria, respecto a esto Henderson declaró: “Si no tienen el personal, no pueden atender a los pacientes, incluso si tienen camas”.
Retener al personal médico se ha vuelto un desafío, puesto que después de dos años de lucha contra la pandemia ellos siguen trabajando turnos adicionales gracias a la alta demanda; Barnhart declaró que ha perdido a enfermeras que ganaban hasta 200 dólares la hora.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades han recomendado que las personas hagan cuarentena de 5 días si no han presentado fiebre en más de 24 horas; esto podría significar un problema puesto que si los médicos que están en recuperación regresan antes de tiempo a su trabajo podrían contagiar al personal o a los pacientes.
El fiscal general de Texas, Ken Paxton, firmó una demanda que desafía los mandatos de vacunación del gobierno de Biden, presidente de Estados Unidos; asimismo Abbott ha declarado: “el derecho y la responsabilidad individual de decidir por sí mismo y sus hijos” y no ha realizado una conferencia de prensa en donde se hable sobre Covid-19 en meses.
Por lo tanto, Texas seguirá enfrentándose a una cantidad abrumadora de pacientes infectados. “No podemos simplemente volver a como eran las cosas. Todavía tenemos que mantener la guardia alta”.
En México, los casos también han ido en aumento, el día de ayer se alcanzaron 47 mil 113 casos Covid-19, para lograr un estimado de 4.3M de positivos en todo el país; el presidente, Andrés Manuel López Obrador, contrajo la enfermedad por segunda ocasión; diez estados se encuentran en semáforo amarillo y tres en naranja, lo anterior basado en Datos Covid-19 del Gobierno de México.
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