En el Partido de la Revolución Democrática (PRD) niegan que esté en una crisis que lo mantiene al borde de la desaparición. Su presidente, Jesús Zambrano, habla de un cambio de ideología, nuevos objetivos y una reivindicación con la gente, pero los rostros (los pocos que quedan) siguen siendo los mismos.
En las elecciones de 2021, el PRD perdió la última gubernatura que le quedaba, la de Michoacán. Silvano Aureoles apoyó la candidatura de su amigo y secretario general, Carlos Herrera Tello, pero no logró retener la entidad para la alianza Va x México.
Hoy, Silvano Aureoles, el último gobernador perredista está alejado del mapa político. En redes sociales, su última publicación la hizo en noviembre de 2021 para defenderse de las acusaciones en contra de su administración y no concede entrevistas a medios de comunicación.
En la Ciudad de México, el PRD logró colocar a dos alcaldesas emanadas de sus filas. En Tlalpan, Alfa González sorprendió en las elecciones de 2021 al arrebatarle a Morena la alcaldía que hace unos años gobernó Claudia Sheinbaum.
La otra figura que sorprendió en la CDMX fue Sandra Cueva, alcaldesa de Cuauhtémoc, quien irrumpió en el mapa político al ganarle la elección a Dolores Padierna.
Pero todavía se sabe muy poco sobre Sandra Cuevas. Meses antes de registrarse como candidata de Va X México a la alcaldía Cuauhtémoc, trabajaba en dar a conocer su imagen en Azcapotzalco, a través de su fundación Por un México Bonito.
Sandra Cuevas fue registrada como candidata del PRD en la alianza Va por la CDMX, pero no se le ha visto hacer actividades o comentar asuntos del partido, dejando claro que poco o nada tiene que ver con ellos.
A nivel estatal, el PRD también carece de líderes. En 2021 perdió el registro como partido en Baja California, Campeche, Chiapas, Chihuahua, Coahuila, Colima, Durango, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Nuevo León, Querétaro, San Luis Potosí, Sinaloa y Tamaulipas, al no lograr el 3% de la votación local en las elecciones pasadas.
Prácticamente, el PRD desapareció en la mitad del país. Las elecciones de 2022 son una oportunidad para demostrar si en realidad lograron convencer a sus bases y a los votantes de que en realidad cambiaron o simplemente desaparecer de otros estados.
En el caso de los ayuntamientos, el PRD gobierna en apenas 115 de los 2 mil 471 municipios que conforman el país. La Ciudad de México dejó de ser su bastión y ahora su fuerza se concentra en una parte de Guerrero.
En lo que respecta al Congreso de la Unión, el PAN tuvo que “prestarle” senadores para no perder su bancada y en la Cámara de Diputados apenas logra conservar 14 curules, menos de la mitad de lo que tienen el PT o el Partido Verde.
Los líderes del PRD ya no están en el partido y no parece haber nadie que alce la mano para un relevo generacional.
Cuauhtémoc Cárdenas, Andrés Manuel López Obrador, Porfirio Muñoz Ledo, Ifgenia Ibarra, Alejandro Encinas, Ricardo Monreal, Leonel Cota, Marcelo Ebrard, Miguel Ángel Mancera, Alejandra Barrales, Leonel Luna, los nombres fuertes que ayudaron al PRD a crecer en la CDMX y en el país ya no están en el partido.
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