Este viernes, la plataforma Netflix estrena “Historia de un crimen: La búsqueda”. Una serie basada en la desaparición de la niña Paulette Gebara Farah en el 2010. Uno de los casos más difundidos mediáticamente en las últimas décadas en México.
“Historia de un crimen: La búsqueda“ está producida por Dynamo y protagonizada por Regina Blandón y Dario Yazbek. Es la tercera entrega de una serie antológica. Las anteriores fueron sobre el homicidio del candidato a la presidencia en 1994, Luis Donaldo Colosio, y la muerte del colombiano Luis Andrés Colmenares.
La historia retoma el caso de Paulette, una niña de cuatro años con discapacidad que desapareció en su casa en Huixquilucan, Edomex. Tras varios días de investigación y una campaña mediática para su localización, la menor apareció en su cama con señales de asfixia.
El caso dejó muchas dudas. La conclusión fue que Paulette se movió de la cama, cayó y murió asfixiada en el espacio entre la cama. Donde pasó los nueve días de búsqueda sin ser encontrada por las diversas personas que revisaron el lugar.
¿Qué pasó con el caso Paulette Gebara?
Paulette era una niña con deficiencia motriz y trastorno del lenguaje que vivía en Huixquilucan, Estado de México, con su padre Mauricio Gebara y su madre Lizette Farah. Además de tener una hermana y dos nanas, Erika y Martha Casimiro.
En 2010, el Edomex era gobernado por Enrique Peña Nieto, mientras que la presidencia de México se encontraba en manos de Felipe Calderón.
La noche del domingo 21 de marzo, la niña fue acostada por su madre y esa fue la última vez que vieron. A la mañana siguiente, la primera en notar su desaparición fue Erika.
Tras la denuncia ante la Fiscalía del Edomex, comenzaron las investigaciones. La familia inició la difusión por redes sociales, lo que tuvo visibilidad y se convirtió en una búsqueda nacional.
Sin embargo, el 29 de marzo, el Procurador General del Estado de México, Alberto Bazbaz, que las declaraciones de los padres y las niñeras tenían inconsistencias.
La madre, Lizette Farah, supuestamente había hablado con un secuestrador a quien prometió que no habría represalias si regresaba a su hija. Mientras que Mauricio Gebara decía no haber estado en casa la mañana de la desaparición.
Durante esos nueve días, hubo policías, perros entrenados y entrevistas con TV Azteca, Televisa y Milenio que empezaron por el cuarto de Paulette. Pero fue hasta la madrugada del 31 de marzo de 2010 que el cuerpo de la menor fue encontrado en la habitación.
De acuerdo con los informes, murió “asfixia mecánica por obstrucción de las cavidades nasales y comprensión tórax-abdominal”. Paulette dormía con una tela sobre su boca, que se le colocaba cada noche para evitar que durmiera con la boca abierta. Al voltear por sobre su cama, terminó sobre los pies y eso provocó la muerte.
La autopsia no reveló violencia sexual, rastros de drogas o sustancias tóxicas. Aunque sí ingirió alimentos al menos cinco horas antes de morir. Y su cuerpo tenía un un golpe en el codo y la rodilla izquierdos, y dos trozos de cinta adhesiva sobre ambas mejillas.
Las investigaciones continuaron contra los padres y las nanas que terminaron el 4 de abril sin ningún responsable. Mientras que el procurador del Edomex renunció de su cargo tras los cuestionamientos sobre el caso de Paulette Gebara.
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