OCCMundial es una de las blosas de trabajo online más populares en México. Sin embargo, la empresa no tiene la capacidad de evitar por completo que se publiquen ofertas de empleo fraudulentas.
Cualquiera puede publicar una vacante de empleo en la página con los términos que elija. Incluso, tienen la opción de ocultar datos tan importantes como salarios, canales de contacto o actividades a desempeñar.
Lo anterior es un enorme riesgo para los buscadores de empleo, quienes sí están obligados a compartir su información personal para postularse a una vacante que puede resultar fraudulenta.
La plataforma OCCMundial tiene herramientas para denunciar las ofertas de empleo falsas y varias entradas de blog en su página sobre el tema. Pero todavía no se implementan herramientas eficaces que permitan bloquear por completo a las empresas fantasma y estafadores que la utilizan para encontrar víctimas.
El siguiente caso es un ejemplo de cómo grupos delictivos enganchan a las personas con vacantes de trabajo falsas en páginas como OCCMundial para robarles sus pertenencias. Ocurrió en la Ciudad de México a finales de febrero de 2022.
Ofertas de empleo en OCCMundial resultan en fraudes para robar computadoras
El siguiente caso es un ejemplo de cómo grupos delictivos enganchan a las personas con vacantes de trabajo falsas en OCCMundial y páginas similares para robarles sus pertenencias.
Ocurrió en la Ciudad de México a finales de febrero de 2022. La víctima del fraude se llama Karla y relató su historia al canal de YouTube CABALLERO GuuS. Posteriormente, Datanoticias contactó a la joven para la siguiente entrevista.
Los estafadores se gana tu confianza
Karla explica que se postuló en OCC Mundial en vacantes para asistente administrativo. Al día siguiente, una mujer que afirmó ser psicóloga y llamarse Brenda la llamó para informarle que había sido aceptada. Sin embargo, esto fue el inicio de un fraude bien elaborado:
“Yo ya llevo tiempo buscando trabajo como un año. Metía solicitudes en varias plataformas. Un día metí sólo en OCCMundial, por eso sé que fue de ahí. Al otro día me llamaron como a las 10:00 am, yo estaba dormida y me despertó la llamada. Se escuchaba la voz de una mujer joven. Me dijo:
‘Hola, Karla. Metiste solicitud para un trabajo de asistente administrativa y me interesa tu perfil. Yo soy psiquiatra y necesito una asistente administrativa y que sea también mi asistente personal que me lleve la agenda. Por los casos que manejo, todo es confidencial, entonces comprenderás que necesito a una persona que sea de mi entera confianza y también manejo una empresa, con mis colegas, de reclutamiento, de escoltas y choferes ejecutivos’“.
La joven afirma que la supuesta psicóloga se presentó como una persona amable y profesional, lo que le dio cierta confianza para aceptar ir a una entrevista.
Tras la llamada, recibió indicaciones desde el número celular 55 1187 0691 para asistir al día siguiente a un edificio ubicado en la calle Francisco Díaz Covarrubias N° 11, en la colonia San Rafael, alcaldía Cuauhtémoc (Google Maps). Explica que la mujer le pidió llevar su laptop personal por una cuestión de logística:
“Me dijo: ‘Oye, una cosa, acabamos de empezar a montar la oficina y específicamente no tengo una computadora que darte a ti, ¿tú tendrás alguna o un iPad para empezar a trabajar? Yo creo que en un mes ya estaría dándote un equipo para ti o si quieres trabajar con la misma computadora vemos como lo manejamos’.
Le respondí que sí tenía una computadora y me citó a las 2:00 pm y me dijo que me iba a pasar la dirección por WhatsApp y darme indicaciones de lo que iba a hacer”.
No sabes si los demás son víctimas o cómplices de la estafa
Al día siguiente, Karla asistió a la entrevista. La supuesta psicóloga le mando mensajes para darle instrucciones de lo que sería su primer día de trabajo. Le pidió enfocarse en sus actividades y no entablar conversación con las demás personas en el edificio. Le dijo que ya habría tiempo para socializar después:
“La mujer me avisó que iban a estar otras colegas, la psicóloga Casandra y la licenciada Hanny. Me dijo que iban a tener una capacitación con personas que querían contratar de escoltas y chofer ejecutivo. Lo que tenía que hacer yo era anotar todo lo que pareciera relevante de los asistentes. Desde cómo se comportan, cómo van vestidos, sus nombres y edades. Me avisó que ella no iba a poder llegar porque iba a ir a Médica Sur a una junta o entregar unos papeles y que iba a llegar como a las 4:00 pm.
Me indicó ir con el cabello recogido y un dato muy importante es que me pidió no hablar mucho con los demás. Me dijo:‘Yo sé que eres una chica joven y que eres muy sociable, pero te voy a pedir un favor. El día de hoy no intentes socializar con los que veas ahí porque me interesa mucho que te concentres en lo que tienes que hacer. Ya después tendrás tiempo de hablar, luego las invito a comer para que nos conozcamos'”.
Karla narra que al presentarse en el edificio todo parecía normal. Un guardia le dio acceso y posteriormente pasó a una pequeña sala de juntas en donde se encontró con las dos personas que le habían comentado. Menciona que le pareció raro que ambas parecían de su edad, no mayores a 25 años.
Luego de esperar un momento, Karla les hizo la plática, a pesar de que la psicóloga Brenda le pidió que no lo hiciera. Fue en ese momento que comenzó a sospechar un poco de la situación:
“Hable con ellas y me dijeron que tenían 23 y 24 años. Yo les pregunté a qué se dedicaban en la empresa. Una era asistente de la psicóloga y la otra que era su asistente personal. Me dije a mi misma que se suponía que a mí me están contratando para eso. Pero pensé que quizá yo iba a ser su asistente administrativa.
Casandra dijo que ese era su primer día de trabajo y que no conocía a la psicóloga. Hanny llevaba una semana y tampoco la conocía, pero mencionó que sí conocía a otro doctor, que yo supongo que se hacía pasar por su marido o su socio o algo así.
En eso llegaron las personas, cinco hombres y una mujer. Les dieron la capacitación y yo comencé a anotar todo como me lo pidieron. Se me hacía raro que las personas que se postulaban para guardias no cumplían con el perfil físico que esperarías para un escolta. Incluso yo era más alta”.
Un robo bien planificado
Para Karla, todo parecía ir más o menos normal. Tenía algunas sospechas, pero confió en sus compañeras. Finalmente, la psicóloga Brenda avisó que no podría llegar al edificio y les pidió seguir si ella.
Entonces, la licenciada Hanny le pidió a Karla y a Casandra sus computadoras para que un supuesto técnico les instalara los programas que necesitarían para trabajar. Confiadas en que estaban en un lugar cerrado y con un vigilante, las entregaron.
Momentos después, el fraude se concretó. Hanny salió del edificio sin que lo notaran y, supuestamente, llevó las computadoras hasta una plaza ubicada Santa Úrsula, según les explicó horas después por WhatsApp.
Mientras tanto, aún en el edificio de la colonia San Rafael, Karla y Casandra estaban nerviosas porque el tiempo pasaba y no recibían noticias sobre sus laptops. De pronto, la psicóloga Brenda las contactó para pedir la contraseña de sus equipos y avisar que no las vería hasta el siguiente lunes:
“Ella le llamó a Casandra y le dijo que había tenido un accidente y que no iba a poder llegar. Le pidió terminar la capacitación y decirle a todas las personas que ella se comunicaría con todos el día lunes para seguir con el proceso de selección.
Para eso, Hanny ya no estaba. Lo primero en lo que pensé fue en mi laptop. Casandra tenía el número de Hanny, no sé por qué, y le envió un mensaje para ver que estaba pasando y le respondió:
‘No se nada, sé lo mismo que tú, que tuvo un accidente y no me dice nada. Yo ya entregué las laptops y ya’.
Yo le pedí a Casandra que le preguntara en dónde entregó las laptops y Hanny sí respondía, pero le daba vueltas al asunto. Dijo que las dejó a un sujeto que era el supuesto ingeniero en una plaza de Insurgentes Sur.
Nos salimos de la oficina y le pregunté a Casandra para dónde iba. Ella dijo que para el Metro. Yo traía mi coche y le ofrecí que la pasaba a dejar, yo pensando en sondearla más para saber que es lo que ella opinaba sobre lo que ocurría.
Entre la plática dijo que estaba muy raro que nos hayan quitado las laptops y seguimos insistiendo a Hanny. En ese punto todavía teníamos un poquito de esperanza de que nos fueran a marcar el lunes.
Nos despedimos. La dejé en el Metro y me fui. Llegué al trabajo de mi mamá y le conté lo que había pasado y me dijo que era casi seguro de que ya me habían robado“.
Se concreta el fraude
Karla se sintió deprimida. Se mantuvo en contacto con Casandra y Hanny durante el fin de semana, pero no tuvieron noticias hasta el día domingo.
La supuesta psicóloga Brenda les envió el mismo mensaje a Karla y Casandra en el que les dice que su exesposo le quería quitar la custodia de sus hijos, además de que la oficina de San Rafael ya no iba a operar por cuestiones de seguridad. Mencionó que había problemas de lavado de dinero y que su vida corría peligro, por lo que debía salir de la Ciudad de México:
“En el mensaje decía que mi laptop me la iban a entregar en mi domicilio. Cabe recalcar que yo entregue mis documentos en copia porque en la vacante los pedían, así que sí tienen mi dirección.
Obviamente, sabía que no me la iban a dar, después, ese mismo día en la noche me bloqueó la tal Brenda y Hanny no nos bloqueó, pero nos quedó la duda.
A Casandra también le mandaron el mismo mensaje de que según corría peligro la vida de la psicología y la bloquearon. Nunca nos entregaron la laptop, nunca nos volvieron a llamar, ni nada. Hasta ahí quedó”.
“Dejaré de buscar empleo por plataformas por ahora”, dice Karla
Karla opina que es muy grave que existan este tipo de ofertas de empleo fraudulentas en platafomas como OCCMundial, que se supone son seguras.
Menciona que esta no es la primera experiencia negativa que tiene al buscar trabajo en Internet, pero sí la más grave.
“Al final me robaron mi laptop, pero pudo ser peor. Pudieron secuestrarme o hacerme algo peor, está mal que ya no sepas que es real y que no”, señala.
La joven asegura que por ahora dejará de buscar trabajo por Internet. Dice que tiene temor a ser víctima de ofertas de empleo fraudulentas una vez más y prefiere enfocarse en otras actividades.
Ni ella ni Casandra regresaron al edificio de la colonia San Rafael por miedo a que les suceda algo. Tampoco denunciaron los hechos con las autoridades porque no creen que vayan a solucionar su problema o que OCCMundial haga algo.
Opina que muchos casos documentados en los que las investigaciones no avanzan y las empresas fantasma y estafadores siguen comentiendo los mismos fraudes una y otra vez.
Lee también: