En 2018 se limpiaron 60 cenotes de los 3 mil que hay en Yucatán, de los cuales fueron retiradas, aproximadamente, 32 toneladas de basura. De acuerdo con los investigadores y autoridades ambientales del estado, hasta ahora hay al menos 6 mil kilo de desechos en tan sólo nueve cenotes.
Esto impide el flujo de agua en los manglares. Entre los desperdicios hay residuos tecnológica como celulares, baterías, televisores y otros materiales con sustancias nocivas para la flora y fauna del lugar.
Los trabajos de limpieza en la sanación de cenotes incluyen la plantación de flora de la zona. De esta forma se promueve también la participación de comunidades locales.
Los cenotes son cuerpos de agua que se han considerado también como sitios sagrados. Son sistemas con un alto valor ecológico en la península.
Son importantes también por ser los lugares en donde los mamíferos, aves y reptiles van a hidratarse. Hasta el momento se ha realizado la limpieza en los Cenotes X-Pakay, Uitzán, X-Becal, Popolá, Chihuojol, Kaua, Libre Unión, Yaxcabá, Tabi y ChénHa, entre otros.
La contaminación del agua está ocurriendo en mares y océanos de todo el mundo. Un ejemplo de ello es la llamada “Isla de Basura”, incluso hay también un proyecto que está intentando limpiar estos desechos que se concentran en el mar y dañan el ecosistema.
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