En los últimos días tres doctores han sido secuestrados de forma similar en diferentes estados del país. Los hacen ir a una cita médica, para retenerlos y pedir un rescate.
Uno de ellos fue Ricardo Juan García Cavazos, en la Ciudad de México, director de la carrera de medicina del IPN. Él fue contactado por un paciente que insistió en ser atendido por el doctor.
Le proporcionaron un número de teléfono y una dirección a la que acudió sin sospecha alguna. Sin embargo, todo era un plan para pedir dos millones de pesos de rescate.
Cuatro plagiarios se encargaron de retenerlo. La primera era una mujer que conducía una camioneta, luego otras tres personas se encargaron de someterlo.
El doctor fue obligado a realizar transferencias bancarias desde su celular mientras daba vueltas a bordo del vehículo. Acto seguido le solicitaron más dinero por lo que se trasladaron hasta la casa del médico.
Un familiar se comunicó con él y al escucharlo extraño notó que algo estaba sucediendo, por lo que pidió el apoyo de la policía. Una persona está detenida por este delito de secuestro mientras que los cómplices continúan libres.
El segundo doctor fue raptado de una forma similar, pero gracias a vecinos el secuestro se pudo evitar.
El dentista identificado como RARC, para resguardar su nombre, salía de su consultorio ubicado en Orizaba, Veracruz, cuando una banda integrada nuevamente por tres hombres y una mujer lo subieron a la fuerza a un vehículo que funcionaba como taxi.
El hombre de 45 años se resistió al rapto e intentó forcejear con los delincuentes. Las personas que se encontraban cerca se percataron de la situación y lo auxiliaron intentando someter a uno de los hombres mientras los otros cómplices huyeron en el taxi.
De igual modo, solo uno de los hombres involucrados fue detenido e identificado como “El Pinky” de 32 años.
Un mes antes, el médico Alfredo “N” de 81 años de edad, fue liberado tras haber permanecido cautivo por varios días en el puerto de Veracruz.
Familiares de la víctima comenzaron a solicitar ayuda a través de redes sociales y fueron contactados por los secuestradores desde el momento del plagio. Las autoridades del estado se acercaron a ellos y lograron localizar al profesional de la salud con vida.
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