El Virus del Papiloma Humano (VPH) es la enfermedad de transmisión sexual más común en México, y el mundo, que se estima que más el 80% de las mujeres estén contagiadas en algún momento de su vida, al igual que más del 60% de la población en general.
El síntoma característico del VPH es la aparición de pequeñas verrugas en la zona genital, tanto en hombres como mujeres.
Otro indicio común son un incremento notable de lesiones en los labios de la boca, conocidos popularmente como ‘fuegos labiales’.
La vía que aumenta el índice de contagio es el sexo oral practicado sin protección, aunque cualquier contacto sexual sin condón es ya un riesgo.
Debido a que es tan común en la población, la mayoría de los portadores no sabe que están infectados, pues el virus puede mantenerse dormido sin presentar algún síntoma por varios años.
La Organización Mundial de la Salud advierte que hay más de 100 variaciones identificadas de VPH, de las cuales 14 son potencialmente cancerígenas.
El principal cáncer que se desarrolla a partir del VPH es el cervicouterino, en mujeres, que por cierto ya es la segunda causa de muerte en la población femenina en México, con cerca de 12 fallecimientos por cada 100 mil habitantes.
Ante todo esté panorama, es importante señalar que el 99% de los casos de VPH pueden ser prevenidos mediante el uso de condón durante cualquier encuentro sexual.
También se puede tratar de manera eficiente si es detectado a tiempo y no es dañino en la mayor parte de los casos, pero si evoluciona a cáncer entonces sí es un problema.
Antes de los 30 años, el sistema inmunológico se encarga de contrarrestar los efectos del VPH, pero después de esa edad las defensas del cuerpo comienzan a decaer y el virus crece con mayor oportunidad.
Por eso, es importante la prueba del papanicolau, que ayuda a su detección. También las visitas al ginecólogo, en caso de mujeres, y urólogo, en los hombres.
El VPH no tiene una cura definitiva aún. Pero existen dos vacunas que ayudan a prevenirlo y se pueden aplicar a partir de los 11 años de edad, tanto en niños como niñas.