Para miles de extranjeros, la Ciudad de México se convirtió en una alternativa para vivir temporal o permanentemente. Particularmente para los ciudadanos estadounidenses, su dinero rinde más y esto les permite acceder a mejores viviendas, servicios y entretenimiento que el que podrían pagar en su país.
De acuerdo con el gobierno de los Estados Unidos, al menos 1.6 millones de sus ciudadanos viven en México, pero no todos ellos están completamente regularizados.
Muchos de estos habitantes extranjeros en México utilizan su visa de turista para permanecer en el país sin tener que tramitar una residencia temporal o permanente. Esta situación dificulta saber con precisión en qué entidades están concentrados.
Sin embargo, en estados como la Ciudad de México, Quintana Roo, Baja California, Guanajuato y Jalisco se documentó en diversas investigaciones periodísticas un arribo mayor de extranjeros que se mudan de manera temporal o permanente en colonias de mediana y alta plusvalía.
¿Cuáles son las razones de este fenómeno? Casi todos los testimonios en reportajes de México y Estados Unidos sobre este fenómeno migratorio coinciden en la misma serie de motivos:
- El dinero les rinde más.
- Pueden comprar o rentar viviendas en zonas de alto valor por un precio menor al que pagarían en Estados Unidos por un espacio más modesto.
- Consideran que hay más seguridad.
- El clima les parece agradable.
- Disfrutan de la gastronomía y cultura local.
- Les parece un lugar agradable para hacer trabajo a distancia.
- No pagan tantos impuestos como en su país.
En un reciente tuit, el periodista y escritor estadounidense Jeffrey A. Tucker afirmó que la Ciudad de México le pareció limpia, sin crimen ni indigentes en la calle, con un buen clima y hasta tres veces más barata que Estados Unidos.
Su publicación generó diversas opiniones, tanto de mexicanos como extranjeros, que le cuestionaron en qué parte de la CDMX estuvo, pues esa descripción no refleja lo que en realidad ocurre en la capital mexicana.
La visión de Jeffrey A. Tucker sobre la CDMX y otras ciudades mexicanas es muy habitual en agencias de Estados Unidos que se especializan en servicios de reubicación. Es decir, se encargan de promover la mudanza de familias estadounidenses a México.
Un aspecto negativo de esto es que el aumento de la población extranjera en ciertos puntos de una ciudad acelera los efectos de una gentrificación, tales como los incrementos en los precios de la vivienda y los servicios, la modificación del espacio urbano, cierre de negocios locales, así como el desplazamiento de los habitantes originarios.
En colonias como La Condesa, Roma, Juárez, Escandón, San Rafael, Tacubaya, San Miguel Chapultepec, Xoco, Coyoacán, del Valle, San Ángel, Santa Fe, Nápoles o Anáhuac se han observado múltiples casos de desplazamiento y encarecimiento de la vivienda.
Además, también en estas colonias, muchas vecindades, edificios y casas han sido demolidas para construir nuevos desarrollos inmobiliarios cuyos precios no son accesibles para el 90% de la población de la Ciudad de México.
Estadounidenses en México viven “ilegalmente”
No se sabe con exactitud cuántos extranjeros viven en México. Cifras del INEGI indican que son poco más de un millón, pero tan solo el gobierno de Estados Unidos estima que hay 1.5 millones de sus ciudadanos en nuestro país.
La mayoría de los extranjeros que habitan en México son inmigrantes de Latinoamérica y estadounidenses, pero la mayoría no tienen formalizada su residencia ante las autoridades.
En el caso de los latinoamericanos, son migrantes indocumentados que buscan llegar al norte de México para cruzar la frontera Estados Unidos.
Mientras que en el caso de los estadounidenses, la mayoría tiene una visa de turista y con ella se quedan a vivir en México sin tramitar su residencia temporal o permanente en el país.
Datos del Instituto Nacional de Migración (INM) brindan un poco más de orientación al respecto. Por ejemplo, se sabe que la Ciudad de México y Quintana Roo y Jalisco concentran cerca del 50% de los residentes extranjeros formalizados en el país.
El último informe del INM que habla sobre el tema, señala que entre enero y octubre de 2022 se contabilizaron más de 166 mil personas extranjeras con una residencia formal en México. De ellos, 24.2 mil son provenientes de Estados Unidos.
Asimismo, se reportan aumentos en el número de estadounidenses que sí formalizaron su residencia en la Ciudad de México tras la pandemia de Covid 19.
En ese sentido, el INM tiene cuatro trámites para formalizar la residencia de ciudadanos extranjeros en México:
- Tarjeta de Residencia Temporal.
- Renovación de Tarjeta Residencia Temporal.
- Tarjeta de Residencia Permanente.
- Renovación de Tarjeta Residencia Permanente.
En las cuatro categorías, se notaron incrementos de hasta el 50% en el número de estadounidenses que hicieron alguno de esos trámites para vivir formalmente en la Ciudad de México, entre el año 2018 y de enero a noviembre de 2022.
Por ejemplo, en 2018, 1 mil 818 ciudadanos estadounidenses tramitaron una residencia temporal en la Ciudad de México ante el INM por primera vez y se renovaron 1 mil 125; mientras que entre enero y noviembre de 2022 se emitieron 2 mil 139 nuevas tarjetas y se renovaron 1 mil 111.
En cuanto a las solicitudes de residencia permanente, en 2018 se emitieron 276 nuevas tarjetas y se renovaron 10. Para 2022, se emitieron 511 nuevas tarjetas y se renovaron 49.
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