Las granjas de bots son herramientas programadas para generar una acción determinada en Internet. Su uso principal en la política es para dirigir ataques o apoyar a una persona, postura o hecho.
Los bots son aplicaciones que siguen instrucciones para hacer una tarea de forma repetitiva. Por ejemplo, apoyar un hashtag en Twitter/X, colocar comentarios negativos en publicaciones de Facebook, seguir a usuarios de Instarga, o generar visitas a un video en YouTube.
Estos bots pueden ser programados en computadoras o celulares, y solamente requieren de la instrucción específica para poder trabajar de forma automatizada.
Hay gente que se dedica a vender granjas de bots, aunque este tipo de actividad no se encuentra formalmente regulada, debido a que la mayoría de las redes sociales tiene mecanismos para luchar contra ellas.
Aun así, los bots pueden librar de manera sencilla esas barreras. En el caso de X o Twitter, basta con crear una cuenta y actuar como si se tratara de un humano, haciendo repósteos o dando likes a publicaciones, para aparentar ser una persona real.
Una vez que las granjas de bots tiene una gran cantidad de cuentas operando, pueden ejecutar las tareas que se les asignan, como atacar a personas en Internet o ayudar a inflar una tendencia.
La otra forma de manejar granjas de bots es a partir de las multicuentas, que básicamente es lo mismo, pero en lugar de que los bots sean programas informáticos siguiendo instrucciones, las cuentas son manejadas por personas reales.
Es decir, una persona maneja varias cuentas de una red social al mismo tiempo y con ellas ataca o apoya, según sea el caso, a otro usuario o publicación.
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