El pasado miércoles 13 de abril, una adolescente de 15 años fue abusada sexualmente en un local ubicado dentro de la estación Centro Médico del Metro de la Ciudad de México. La menor fue violentada por el propio dueño del local, Rodrigo Rodríguez García de 28 años de edad, quién engaño a la víctima diciéndole que debían hacer un inventario del local a las 5:30 de la mañana y a puerta cerrada “por cuestiones de seguridad”. Fue entonces cuando estuvieron totalmente solos que el sujeto la atacó físicamente y después la violó.
Lee también: María Julia. «Usted no es el padre biológico de Debanhi, ¿verdad?». Critican a periodista por revictimización en entrevista
La familia de la menor ya presentó una denuncia ante la Fiscalía de Investigación de Delitos Sexuales de la Fiscalía General de Justicia capitalina (FGJ CDMX) en contra del agresor por los delitos de violación, violencia física y corrupción de menores.
Ana fue violada en la estación Centro Médico del Metro de la CDMX
La historia de este caso de abuso sexual y violación fue dada a conocer por la hermana de la víctima, quien se identifica como Cynthia Castillo de 22 años de edad. Para ella, las redes sociales se han convertido en la mejor herramienta para difundir el terrible caso de su hermana y dar a conocer el nombre del agresor para que no quede impune pos sus delitos.
Cynthia se ha encargado que a través de Twitter, Instagram, Facebook y TikTok (@cyncasx), las personas conozcan a detalles como sucedieron las cosas el día que su hermana de nombre Ana, fue atacada y violentada sexualmente, y como gracias a su valiente testimonio, pudieron actuar de inmediato para ir detrás de Rodrigo “N”. Aunque en un principio, Cynthia solo había compartido el caso a través de Facebook, gracias a los consejos de muchas personas, decidió tomar las otras plataformas para que su denuncia tuviera más impacto:
La historia de este caso comienza así: “Hola chicxs, buenas noches. Quiero contarles algo por lo que estamos pasando mi familia y yo. Quisiera que esto se difundiera porque me gustaría que nadie lo viviera, que nadie pasara por esta situación porque es horrible. Tengo una hermana de 15 años. Ella trabajaba en un local del metro Centro Médico”.
Cynthia detalló que su hermana entro a trabajar en ese lugar “porque no le echó ganas a la escuela” y decidió trabajar este año para que el próximo volviera a presentar el examen del COMIPEMS y continuara con sus estudios.
Al momento de agresión, Ana llevaba trabajando apenas un mes trabajando en el local. El establecimiento de nombre “Carets”, ubicado en el transborde de estación en la línea 3 a la línea 9 (dirección Pantitlán-Tacubaya), es propiedad de Rodrigo “N” de 28 años y una mujer de nombre Pamela “N” de 30 años de edad.
Cythia resaltó que desde el primer día en que su hermana entró a trabajar mantuvo su distancia con ambos y sobre todo fue respetuosa con ellos hablándoles de “usted”. Además de atender a los clientes, ella tenía que mandar cortes cada hora de lo que vendía en la tienda a estas dos personas.
Pero desde que Ana ingresó a trabajar con estas personas, se percató de que Rodrigo le escribía de una forma extraña, porque le preguntaba que cómo estaba, si ya había comido o si necesitaba algo, a lo que ella solo decía “no ocupo nada gracias” y mantenía su distancia en todo momento.
Pero el miércoles 13 de abril todo cambió. Aquel día el mundo de Ana no volvió a ser el mismo.
Ella entró a trabajar por órdenes de Rodrigo a las 5:30 de la mañana. Al llegar al lugar, vio que la cortina chica del local estaba abierta, entonces entró y encontró al dueño quien ya la esperaba para “hacer inventario”, pero tenían que hacerlo con la cortina cerrada por “cuestiones de seguridad”.
Cynthia detalla que fue en ese momento que el sujeto comenzó a acercarse a su hermana de forma insistente con el pretexto de decirle los precios de algunas cosas. Pero fue tanto su insistencia que llegó un momento en que la besó y sujetó fuertemente.
“Ella sacada de onda lo empujó y ese wey la agarró fuerte y le dijo que no hiciera nada porque le iba a ir mal, la golpeó y tiró al suelo. Mi hermana en shock no supo cómo reaccionar y por el impacto ni siquiera pudo gritar.
Al momento que la tiró al piso, ese wey se empezó a quitar la ropa y la violó, le pegó y amenazó. Mi hermana (estaba) muy espantada tratando de quitárselo de encima (pero) no pudo con la fuerza de ese tipo”, detalló.
Fue en ese momento que la madre de ambas fue al local porque a Ana se le había olvidado el cargador de su celular. Cabe aclarar que la familia de la víctima vive a solo dos estaciones de la estación Centro Médico.
Cuando la mamá de Ana y Cynthia llegó se dio cuenta de que el local estaba cerrado, situación que la espantó y puso en alerta. De inmediato empezó a tocar la puerta y fue cuando Ana se dio cuenta que su madre estaba afuera pero Rodrigo le dijo que no gritara ni nada, porque le iba a ir mal a ella y a toda su familia. Le dijo que se vistiera y que no dijera nada.
Cuando el agresor por fin abrió la cortina le dijo a la madre de la víctima que estaban “haciendo inventarios a puerta cerrada por seguridad”. Pero este argumentó no convenció a su madre quien se dio cuenta que su hija estaba actuando extraño. Fue entonces que le dijo al agresor que iba a llevarse a Ana. Ante esto el tipo respondió que “como se la iba a llevar, que que cosas estaba pensando”, que eso “le ofendía a él”.
Pero la mujer contestó que ella era menor de edad y se la podía llevar cuando quisiera.
Lee también: Difunden medios supuesto abuso a Debanhi a partir de información falsa
Cuando finalmente llegaron a casa, Cynthia señaló que su hermana estaba muy callada y no quería decir nada. Pero fue alrededor de las 11 de la mañana cuando Ana se soltó a llorar y les contó todo lo que había ocurrido.
En ese preciso momento toda la familia acudió a interponer la demanda en contra de Ricardo “N” y que las autoridades actuaran de forma inmediata para detenerlo. Como parte de su denuncia, Cynthia compartió fotografías del agresor y del lugar donde ocurrieron los hechos.
Además compartió parte de la denuncia que presentaron en la FGJ CDMX en contra del violador Ricardo “N”. En otro documento se detalla que la víctima con domicilio en la colonia Doctores de la alcaldía Cuauhtémoc, fue citada el jueves 14 de abril para comparecer y ser valorada por peritos en materia de psicología.
Destrozan local en estación Centro Médico para exigir justicia para Ana
Debido a la repercusión que tuvieron las publicaciones de Cynthia en redes sociales, el pasado domingo 24 de abril el local donde ocurrió la agresión y violación de Ana Castillo, fue destrozado. En Twitter circula una foto donde se puede aprecia que el lugar de nombre Carets luce totalmente destruido.
Se acuerdan del caso de violación en Metro Centro Médico? Pos esto pasó hace ratito 🔥🔥🔥 pic.twitter.com/JMAAcPpSLC
— Bart Chanona (@ElBartoChanona) April 25, 2022
Los refris, anaqueles y el mostrador se ven rotoso mientras que gran parte de los productos que tenían en venta yacen en el suelo. Además se alcanza a apreciar que en la barda ubicada a un costado del local fue pintada la palabra violador en referencia a Rodrigo “N”.
Lee también: Debanhi Escobar fue homenajeada por sus compañeros de la Universidad Autónoma de Nuevo León
Hasta el momento de publicar esta nota, el caso de Ana Castillo ha tenido miles de reacciones y compartidas en todas las plataformas en las que su hermana Cynthia ha compartido su caso.