A pesar de que México está inmerso en un clima de violencia e inseguridad que este año ya dejó 14 mil personas asesinadas, cuatro de cada diez policías estatales preventivos no están certificados para realizar su labor.
Según el informe Modelo Óptimo de la Función Policial, elaborado por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), el 44 por ciento de los policías estatales no cuentan con su Certificado Único Policial (CUP), con el cual se acredita que los agentes están capacitados para laborar en las instituciones de seguridad pública y el sistema penitenciario de los estados.
Según los Lineamientos para la Emisión del CUP, que fueron publicados en el Diario Oficial de la Federación (DOF) desde el 2016, este certificado es entregado a quienes aprueban su evaluación de control y confianza y una evaluación de desempeño académico. Además se otorga a las personas que tengan competencias básicas y profesionales para ser elemento de seguridad, así como contar con un documento que acredite su formación inicial.
Las instituciones de seguridad pública de los estados son las responsables de emitir los CUP a quienes integran sus filas. Los lineamientos publicados en el DOF estipulaban que las entidades federativas tenían hasta septiembre del 2019 para que todos sus policías contaran con el certificado, sin embargo, eso no se ha cumplido.
La Ciudad de México y el Estado de México son las entidades federativas con una mayor cantidad de policías que ya tienen su CUP aprobado y vigente, con un total de 30 mil y 16 mil elementos, respectivamente.
Mientras que los estados que tienen menos policías con certificados aprobados y vigentes son Hidalgo con 32 policías; Zacatecas con 89; Puebla con 191; Morelos con 298, y Oaxaca con 322.
Debido a que el informe Modelo Óptimo de la Función Policial no desagrega la información sobre cuántos policías tiene cada estado en total, no es posible conocer el porcentaje de elementos de seguridad que no tienen su CUP en cada entidad. Sólo se sabe que a nivel nacional el 44 por ciento de las fuerzas de seguridad estatales están en esa situación.
El fortalecimiento de las policías estatales ha sido una exigencia de organizaciones sociales y especialistas en temas de seguridad desde hace varios años, pues estas instituciones civiles han quedado rezagadas en su desarrollo mientras las Fuerzas Armadas se han hecho cargo de gran parte de las labores de seguridad pública.
Desde el 2006 la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Secretaría de Marina (Semar) fueron comisionadas para enfrentar a los grupos del crimen organizado en el país, y en 2019 nació la Guardia Nacional (GN) para sumarse a esa labor.
Déficit de policías estatales
Pero la falta de preparación y capacitación de policías no es el único problema. En México también hay un déficit de policías estatales preventivos para hacer frente a la inseguridad.
Hasta diciembre del 2020 en el país había 123 mil 070 policías estatales, sin embargo, el SESNSP explica en su informe que los estados debían capacitar otros 101 mil 458 elementos para tener una fuerza mínima de 1.8 agentes de seguridad por cada mil habitantes, con lo que se podría combatir a los grupos delictivos.
“El país tiene poco más de la mitad de los policías preventivos estatales que debería tener”, dice el informe del secretariado ejecutivo.
Baja California, Sonora, Sinaloa, Querétaro, Morelos, Aguascalientes y Coahuila son las entidades federativas que tenían el mayor déficit hasta diciembre del 2020, al contar con menos de 0.5 policías por cada mil habitantes.
A nivel federal el Estado mexicano tampoco cuenta con un cuerpo de seguridad totalmente civil, ya que en 2019 fue eliminada la Policía Federal (PF) para crear la GN que está compuesta principalmente por elementos del Ejército y la Marina.