Cientos de personas fueron desalojadas del Centro Comercial Parque Delta, en la Ciudad de México, la tarde de este 6 de enero, ante una amenaza de bomba. Fue aproximadamente a la una de la tarde que un administrativo de la plaza recibió una llamada anónima que advertía de un aparato explosivo dentro un auto en el estacionamiento del lugar.
Elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana revisaron toda la plaza para buscar el supuesto artefacto explosivos y tras varias horas de trabajo se determinó que se trató de un engaño, el primero de este 2020.
Y es que cada año, decenas de estos casos ocurren en plazas comerciales, escuelas, edificios de gobierno y otros lugares públicos, no sólo de México, sino en todo el mundo.
Por ejemplo, en octubre de 2019 se reportaron tres amenazas de bomba que resultaron falsas, todas en el municipio de Ecatepec, el día 9 de octubre fue en el edificio del Ayuntamiento, el 12 en Plaza Ecatepec y el 16 en la Vocacional 3, del Instituto Politécnico Nacional.
AVISO IMPORTANTE:
¡No se suspenden las clases! ¡No se dejen sorprender!
Se activó el protocolo de seguridad y protección civil en el #CECyT3 ante supuesta amenaza de artefacto explosivo. pic.twitter.com/OTGaEUFz1r— IPN (@IPN_MX) October 16, 2019
Este tipo de ‘bromas’ causan histeria colectiva y, de acuerdo con los protocolos internacionales publicados en diversos artículos del Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos (DHS), ninguna debe tomarse como tal. Por lo que cada amenaza tiene que ser atendida con extrema rapidez y con equipos especiales.
Pero los ciudadanos también pueden intervenir, en cierta medida, en los protocolos de seguridad ante este tipo de emergencias, siempre y cuando no haya más opción y no se arriesgue la vida propia o la de los demás.
Para ello, la ya mencionada DHS publicó un artículo en donde recomienda a las personas:
Buscar toda la información posible
Si usted recibe una llamada telefónica sobre una supuesta amenaza de bomba es importante que mantenga la calma y haga las siguientes preguntas:
- ¿Cuándo explotará la bomba?
- ¿Dónde está la bomba ahora?
- ¿Qué aspecto tiene la bomba?
- ¿Qué tipo de bomba es?
- ¿Qué la hará explotar?
- ¿Usted colocó la bomba?
Procure grabar la llamada y, si es posible, mantener en la línea al sujeto que lanzó la amenaza el mayor tiempo posible.
No tema a ‘hacer el ridículo’, en caso de que sea un caso falso y llame al 911 inmediatamente para explicar la situación, avise al personal administrativo del edificio para iniciar una evacuación.
Es muy importante que el aviso y la evacuación se haga en orden, trate de no escandalizar la situación, esto puede generar histeria en la gente, dificultando la evacuación.
En ese sentido, el Departamento de Seguros de Texas indica que en la mayoría de casos de bombas falsas, el responsable solamente busca llamar la atención o causar daños económicos a empresas instaladas en los edificios amenazados.
Y a pesar de que suelen ser bromas de mal gusto, la Cruz Roja Internacional cataloga las amenazas de bomba como un acto terrorista, por lo que la legislación de cada país castiga de manera diferente a los responsables.
En caso de encontrar un paquete sospechoso
Además de las llamadas, otro método de amenaza es por medio de cartas, paquetes y objetos extraños escondidos entre los edificios.
En caso de recibir un paquete o un sobre que tiene una apariencia sospechosa, puede identificar el nivel de riesgo si el objeto tiene las siguientes características:
- Es correspondencia inesperada o no conoce el remitente.
- La dirección del remitente no existe o no se puede verificar.
- Están marcados con leyendas como ‘Personal’, ‘Confidencial o ‘No pasar por rayos X’.
- La etiqueta es inusual o inadecuada, o con lenguaje amenazante.
- Tienen cables que sobresalen o una lámina de papel de aluminio, olores o manchas extrañas.
- El embalaje es excesivo o usa mucha cinta adhesiva o cordones.
- Tiene un peso inusual para su tamaño y están torcidos o tienen una forma rara.
- No están dirigidos a una ninguna persona en particular.
Si la amenaza resulta ser real y se encuentre un artefacto sospechoso, lo más importante es no manipularlo. Un manual de protección civil para empresas publicado en Estados Unidos, señala que prácticamente todas las cosas que usted pueda imaginarse, podrían llegar a ser bombas.
De hallarse un objeto sospechoso, las preguntas importantes que uno mismo o entre varias personas familiarizadas con el edificio deben hacer son:
- ¿Es inusual?
- ¿Está fuera de lugar?
- ¿Es sospechoso?
Si las respuestas son ‘SÍ’, entonces no traten de mover o indagar más sobre el objeto. Salga del lugar y de aviso a la policía de la ubicación exacta, el tamaño, la forma y por qué cree que es un riesgo.
En caso de explosión
En este punto, la supervivencia personal es la prioridad. No se trata de no ayudar a los demás, sino de que todos conozcan cómo actuar para evitar la menor cantidad de daños.
El Consejo Nacional para la Prevención de Accidentes de la Secretaría de Salud de México indica que debe hacer cursos de Protección Civil a todos los empleados de un edificio, alumnos y trabajadores de escuelas, o residentes de un conjunto habitacional para enseñar a las personas a ponerse a salvo.
Puede solicitar una capacitación con la Dirección de Protección Civil de su alcaldía o municipio. También puede pedir informes en las siguientes ligas:
Ciudad de México -> http://www.proteccioncivil.cdmx.gob.mx/
Edomex-> https://cgproteccioncivil.edomex.gob.mx/cursos
Si usted no tiene un plan de emergencias y una capacitación ante riesgos, las medidas de seguridad ante explosiones dentro de un inmueble recomendadas por la DHS son:
- Protegerse debajo de una mesa o escritorio resistente.
- Cuando dejen de caer objetos, irse rápidamente, y tener cuidado con las escaleras y pisos visiblemente debilitados.
- No usar ascensores.
- Si hay humo, tirarse al piso.
- No detenerse a buscar bienes personales ni para hacer llamadas telefónicas.
- Verificar si hay algún incendio y otros peligros.
- Una vez que afuera, no ubicarse delante de ventanas, puertas de vidrio ni otras áreas potencialmente peligrosas.
- Si está atrapado en los escombros, usar una linterna, un silbato o golpear las tuberías para indicar su ubicación a los rescatistas.
- Gritar solamente como último recurso para evitar inhalar polvo peligroso.
- Cubrirse la nariz y la boca con cualquier objeto que tenga a mano.
Después de la explosión
En el supuesto de que la bomba fue real y estalló debe tener en cuenta que puede haber muchas víctimas en el incidente, por lo que, si está en sus posibilidades, debe cooperar con las autoridades en la identificación de las personas que estaban en el edificio.
Es decir, trate de hacer una lista de los compañeros que estaban cerca de usted al momento del estallido.
Brinde orientación sobre el edificio a los cuerpos de rescate, hágalo. Mencione posibles salidas de emergencia y lugares de mayor riesgo, como zonas de maquinaría o cocinas con acceso a gas.
Si no puede ayudar, evacue la zona y diríjase a los servicios médicos. Comuníquese con su familia para notificarles que está a salvo y si será trasladado a un hospital, eso ayudará que no llegue más gente al lugar del incidente, dando mayor espacio a los cuerpos de emergencia.
Del mismo modo, si usted ve que un compañero será trasladado a un hospital, pregunte a dónde lo llevarán y si tiene forma de contactar a la familia de esa persona, hágalo.
Es importante tener en cuenta que la policía, bomberos y demás cuerpos de rescate están capacitados para saber cómo manejar la situación. Siga sus instrucciones y no entorpezca sus trabajos.