La inseguridad continúa arrebatando la tranquilidad a pequeños y medianos negocios en Guanajuato. Ahora son panaderías las que enfrentan extorsión y asaltos, informó Óscar Arias Márquez, representante de la Cámara Nacional de la Industria Panificadora de la entidad.
Durante 2019, el sector vivió constantes asaltos a mano armada a locales y camionetas de entrega, además de llamadas de extorsión, informó Arias Márquez en entrevista con el medio local Zona Franca. Por lo que agremiados han tomado medidas como no contestar números desconocidos y con ladas de otros estados.
Además, señaló que la problemática se ha convertido en parte de la cotidianidad, y la falta de alumbrado y seguridad afectan negativamente la economía en Guanajuato.
Los municipios de Celaya, Irapuato y Salamanca fueron los más afectados durante el último año, principalmente por la extorsión y el cobro de piso por parte de la delincuencia organizada.
El pasado 5 agosto, tres mujeres fueron ejecutadas en el interior de la tortillería “La Indita” en Celaya, además de que un comando atacó otros dos comercios. Más tarde, dispararon contra un negocio de venta de materiales de construcción en el que se reportó un muerto y una persona herida.
Todo ocurrió horas después de que comerciantes de dichos sectores se manifestaran contra la extorsión del crimen organizado.
Ese mismo mes, locatarios de cinco cantinas ubicadas en San Miguel de Allende denunciaron de manera anónima haber sido víctimas de extorsiones. Explicaron que tres semanas atrás, sujetos desconocidos dejaron maletas que contenían cocaína y marihuana, con notas que indicaban que debían venderla.
Ante el miedo y la incertidumbre, decidieron tirar las maletas a la basura, no denunciaron con las autoridades y cerraron sus negocios. Como consecuencia, alrededor de 80 personas perdieron sus empleos.
Sin embargo, mediante un comunicado el gobierno municipal y empresarios de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (CANIRAC) afirmaron que la situación era mentira debido a la falta de denuncia por parte de sus agremiados, y aseguraron que los comercios operaban con tranquilidad.
Los comerciantes no volvieron a pronunciarse al respecto, aunque la intimidación continuó replicándose por la entidad.
¿Qué hacer ante extorsión?
De acuerdo con la Policía Federal, ante una llamada de extorsión se deben seguir estas recomendaciones:
– Mantener la calma y valorar la situación: escucha los argumentos del extorsionador y no permitas que el impacto emocional te domine.
– Si te amenazaron con dañar a un familiar, verifica que la persona se encuentre bien.
– Da aviso a familiares y amigos sobre la situación que viviste para prevenirles de cualquier riesgo.
– Si se recibe una nueva llamada amenazante, responda que se trata de número equivocado y cuelgue. De ser posible, descuelgue el auricular por algunas horas para evitar que insistan.
– No cedas inmediatamente ante las exigencias económicas o demandas del extorsionador. Esto significa no realizar recargas telefónicas o depósito alguno.
– Llamar al 088, número telefónico del Centro Nacional de Atención Ciudadana de la Policía Federal, proporcionar toda la información generada en las llamadas telefónicas, como el número de origen, horario, argumento utilizado por el extorsionador y cualquier otro dato que se considere de utilidad.
En el caso de una extorsión directa, que es aquella donde el delincuente se presenta en el domicilio o negocio para amenazar, se realizan las siguientes recomendaciones:
– Mantener la calma y no ceder de inmediato a las exigencias económicas.
– No manifestar negativa directa a la petición de dinero del delincuente. Argumente que necesita buscar alternativas económicas para conseguir lo solicitado.
– Pedir al delincuente el plazo de una semana para dar respuesta.
– Llamar al 088 del Centro Nacional de Atención Ciudadana de la Policía Federal, a fin de que personal especialista brinde el apoyo necesario para evitar ser víctimas del delito.