La expedición marina denominada Nautilus Live hizo un extraño hallazgo en la parte más profunda de la costa de California, se trata de una decena de pulpos que devoran el cadáver de una ballena.
Los científicos a bordo de la nave filmaron la peculiar escena, en donde también otras criaturas, como calamares, cangrejos, peces y anguilas que se alimentaban de los restos de la ballena.
La mayor parte de la carne del cetáceo había sido consumida casi por completo, algunos de los órganos internos y parte de la grasa son visibles aún.
Lo más impactante es que todo el esqueleto de la ballena quedó expuesto sin desarmarse, dando una imagen digna de película de terror. Sin embargo, se detectó la presencia de gusanos en el sistema osea que ya están devorando los huesos.
El encuentro de los exploradores con el ‘festín submarino’ ocurrió de manera inesperada a más de 3 mil metros de profundidad, cerca del volcán submarino Davidson Seamount, en inmediaciones del Santuario Marino Nacional de la Bahía de Monterey.
Los expertos calcularon que la ballena medía entre cuatro y cinco metros de largo, pero aún no se confirma la especie a la que pertenece, pero se sugiere que forma parte de una rama conocida como “ballenas barbadas”.
La expedición Nautilus es parte de la organización Ocean Exploration Trust, fundada en 2008 por el Dr. Robert Ballard, famoso por haber descubierto la ubicación del Titanic y por tomar las primeras imágenes del legendario barco en su actual sitio de descanso.