La NASA encontró un crater que permite saber cómo fueron las últimas horas de los dinosaurios.
Un cráter fue encontrado en el noroeste de Groenlandia y es el segundo hallado así en los últimos meses. En noviembre fue hallado un cráter similar.
Este se encuentra dos kilómetros bajo el hielo y tiene una extensión de 36 kilómetros, se cree que fue formado por un impacto similar al que acabó con los dinosaurios
Este hallazgo se suma a otros que científicos han identificado unos 200 cráteres de impacto en nuestro planeta, pero esta es solo la segunda vez en la historia que se detecta un cráter debajo de una capa de hielo, de acuerdo con VICE.
El más importante de todos ellos es el cráter Chicxulub, situado en la península de Yucatán en México. A pesar su enorme tamaño, de 200 kilómetros, no ofrece vistas espectaculares para un visitante. El cráter está enterrado bajo cientos de metros de sedimentos que se han acumulado a través de los millones de años que han pasado desde que se formó, hace unos 65 millones de años.
Por otra parte, un estudio dirigido por investigadores del Centro de Astrobiología (CSIC-INTA), permitió saber que la fuerza generada por estos impactos equivale a diez mil millones de bombas atómicas como la de Hiroshima.
Eso permitió saber que la explosión quemó la vegetación y provocó un tsunami gigante que arrastró todo tipo de materiales.
El azufre liberado por el impacto bloqueó la luz solar y causó que el clima se enfriara tanto que acabó con los dinosaurios y con el 75 por ciento de las formas de vida del planeta.
Esto provocó que primero la temperatura se elevara demasiado y luego disminuyera. Solo el día del impacto 130 metros de material se depositó sobre el suelo, incluyendo azufre y agua del océano.
Los dinosaurios primero “se achicharraron” y luego murieron de frío por los cambios climáticos causados por el impacto.