Ángel “N”, César “N”, Karla “N” y Sergio “N” formaban parte de una organización delictiva integrada por colombianos que se dedicaban al robo de casas habitación en la Benito Juárez. Fue desmantelada por elementos de la Policía de Investigación.
En la colonia Del Valle ubicaron dos vehículos estacionados en la vía pública, uno de uso particular y otro para taxi. Ambos estaban relacionados con investigaciones por el delito de robo a casa habitación con violencia.
Cuando las cuatro personas notaron la presencia de la policía, intentaron entrar a un domicilio donde fueron capturados e identificados Les aseguraron además armas de fuego, bolsas con marihuana, teléfonos celulares, herramientas y bolsas de lona.
Fueron puestos a disposición del Ministerio Público por los delitos de portación de arma, contra la salud y robo a casa habitación con violencia. Una de las características era la violencia en contra de sus víctimas, a quienes amarraban y golpeaban.
Hace unos meses, Datanoticias reveló la forma en que operan estas bandas delictivas en la Ciudad de México. Su modus operandi es el segundo más utilizado, pues desde 2015 reclutan a mexicanos y venezolanos en sus filas.
Su objetivo son las viviendas de artistas, famosos, empresarios y de adultos mayores. Personas que no están en su casa, poseen objetos de alto valor o, en el caso de los viejitos, tienen poca capacidad de defensa.
Los integrantes de estas bandas utilizan vehículos de modelo reciente para hacer rondines por las colonias de clase media alta. Los grupos delictivos cuentan entre sus filas con mujeres, las cuales se hacen pasar por parejas de los delincuentes en el momento de montar la vigilancia en los fraccionamientos seleccionados.
Una vez que eligieron la casa, tocan el timbre varias veces, para asegurarse de que no haya nadie. Con instrumentos especiales desmontan puertas y alarmas e ingresan.
En un tiempo aproximado de 5 minutos, máximo, se llevan en mochilas aparatos electrodomésticos, joyas, teléfonos celulares, tabletas, computadoras, relojes, efectivo y documentos que luego falsifican.
En departamentos lujosos los colombianos se hacen pasar por empresarios importantes y rentan por algunos meses penthouses y autos de lujo. Forjan amistades con los vecinos y entran a sus casas cuando ellos no están.
Estas bandas organizadas no sólo delinquen en esta capital, sino en ciudades de España, Estados Unidos y hasta Japón. Inclusive son personas en México los que traen a extranjeros para que se dediquen especialmente al robo de casas.
Las autoridades también tienen detectada la venta de los artículos que se roban. Las joyas se venden muchas veces fuera de la CDMX en los estados de Querétaro y Puebla, mientras que las que se quedan en la ciudad son fundidas y modificadas para que no puedan ser identificadas. Los relojes se venden en páginas de Internet a precios bajos, los celulares, tabletas y computadoras, los locales de Eje Central son los elegidos para su venta.
De los imputados que se han capturado, cobran una sentencia que va de los 3 a 6 años en prisión. Dentro de los reclusorios algunos integrantes siguen recibiendo las ganancias de lo robado y dan órdenes de seguir robando casas.