Puedes tener mil, 2 mil o muchos más amigos en redes sociales, pero de acuerdo con un estudio, los humanos sólo pueden tener un máximo de 150 amistades.
Las limitaciones existentes en la capacidad cerebral y el tiempo libre, hace que los humanos no puedan crear más de 150 amistades tanto en redes sociales como en la vida real, según un estudio publicado en la Revista Society Open Science. El resto de las personas son conocidos o reconocidos por nuestra vista.
La investigación realizada por el profesor de psicología Robin Dunbar de la Universidad de Oxford, llegó a la conclusión de que, el número 150 define a las personas con las que se tiene relaciones recíprocas reales, aquellas en las que siente obligaciones y haría favores voluntariamente. En promedio, tenemos cinco amigos íntimos, 15 mejores amigos, 50 buenos amigos, 500 conocidos y mil 500 personas que reconocemos de vista.
Para el estudio, el profesor Dunbar utilizó datos de dos encuestas dirigidas a más de 3 mil 300 personas de Reino Unido.
El primer grupo tenía 155 amigos de Facebook y el segundo 183. Al preguntarles a los participantes con cuántas personas de sus amistades en Facebook podían recurrir para recibir apoyo en una crisis, la respuesta fue cuatro.
Y cuando se les interrogó a cuántos podían acudir por simpatía, el número citado fue 14, haciendo énfasis en el patrón de la limitada capacidad humana de crear amistades en la vida real. Pero también dijo que hay personas con más de 300 amigos, confirmando que si existen excepciones, sin embargo comenta que es realista indagar en saber qué tan bien se conoce a los amigos después de los primeros 200.
Por su parte, el académico de la Facultad de Estudios Superiores Iztacala (FESI) Juan Pablo García Acosta, expresó que por medio de las redes sociales se crean falsas amistades debido a que es difícil construir lazos reales.
“Ni siquiera se le podría llamar amistad virtual, porque simplemente no hay una unión; en todo caso, se trata de conocidos”, explicó García Acosta.
A esto agregó que, una verdadera amistad tiene que ver con un compromiso afectivo, esto incluye valores como solidaridad, lealtad, compromiso y sinceridad; crece y se fortalece por medio de un trato continuo y recíproco. Además, a este valor, si se puede dividir en buenas y malas, con base en si son, o no benéficas para los involucrados.
“Todo vínculo tiene alguna consecuencia; si a partir de él recibimos elementos favorables para nuestro crecimiento personal, podemos calificarlo como bueno, pero si el resultado son alteraciones, disfunciones o afectaciones a nuestro estado emocional y conductas, se trata de una mala amistad”, puntualizó el académico.
A los amigos solemos seleccionarlos en función de las afinidades y la empatía. Es una relación que se construye con el tiempo, que se prueba día a día, pasando por diversas pruebas que definen si se afianzó o no la amistad. “La vida está hecha de momentos, y cuando se comparten satisfacciones y tristezas se construye el vínculo llamado amistad, y esos momentos tienden a ser en realidad las verdaderas pruebas”.
García Acosta dijo que todo ser humano es un ente social que necesita satisfactores de la relación con nuestros semejantes. Si no hay compaginación, gratitud, lealtad, respeto y confianza, no hay una creación de amistad, ya que es ahí donde encontramos apoyo y bienestar emocional, sentimientos que llegan a fortalecer nuestra autoestima. Además, la amistad es esencialmente compartir, y construirla entre las personas es la manera de vivir en paz, obtener el bien común y el apoyo entre seres humanos.