Víctor Reynoso, de Tultitlán, Edomex, creó un líquido contra quemaduras al enterarse del incendio en la Guardería ABC, de Sonora, cuando tenía 10 años. Ahora tiene 18 años y quiere ser químico.
En cuanto el fuego entra en contacto con ese líquido, se apaga evitando que se propague. De esta forma se puede controlar un incendio o pedir ayuda.
Lo hizo como una forma de prevenir accidentes que lesionaran o causaran la muerte a los niños.
No funciona en contra de vapores tóxicos de los incendios, solo repele el fuego.
Este químico lo venden en Estados Unidos pero es muy costoso, su precio es de aproximadamente 40 mil pesos.
Los trajes de los bomberos de México lo tienen pero debe renovarse cada mes, esto no ocurre y por eso hay bomberos quemados o con lesiones.
Víctor asegura que al usar este líquido en su traje, los bomberos pueden entrar a los incendios sin el riesgo de sufrir una lesión o quemadura.
Sirve para todos los materiales combustibles como: ropa, sábanas, cortinas, madera y papel.
Víctor Reynoso es el primer proveedor de este producto en México. Para elaborarlo usa sales químicas en un laboratorio.
Ha hablado con los bomberos de Tultitlán para pedirles asesoría, aunque hasta el momento no ha habido un acercamiento formal para adquirirlo.
Aún no lo han aplicado al traje completo, solo a una manga, a la cual le hicieron pruebas de fuego y aseguraron que sirve igual que el líquido estadounidense.
La diferencia con los de EU es que la materia prima es más efectiva que el otro y que no daña el medio ambiente.
El proyecto lo ha presentado en Paraguay, en 2012, y en Argentina en 2014. Aunque reconoce que para que prospere, lo que hace falta es una cultura de prevención.
Orina para fertilizar
Además del repelente, Víctor tiene el proyecto Fertiorin. Es una pastilla fertilizante hecha con orina humana que ayuda al crecimiento de las plantas.
Gracias a este invento ganó el Premio Nacional de la Juventud hace dos años. Sus padres son químicos y son ellos quienes lo han apoyado y orientado para realizar estos avances.
Víctor se ha presentado en varias ferias de ciencia en distintos países y ayuda a su comunidad en Tultitlán a través del fertilizante o del repelente.
Además considera que todos los avances científicos y tecnológicos pueden estar ligados al cuidado del medio ambiente y de la salud.