“¿Por qué cuelgas, put@?”, “No te hagas pendej@, me vale ve*ga, consíguelo, haber cómo le haces, tienes que conseguirlo”, “Tenemos a tu sobrino. No queremos nada de mamadas. Me vas juntando el dinero”. A un mes del secuestro y asesinato de Norberto Ronquillo se dieron a conocer las llamadas y los mensajes de los agresores del joven estudiante. Pedían 5 millones de pesos por el rescate, de los cuales pagaron 500 mil. Los secuestradores conocían los negocios de la tía, la cual tiene bodegas en la Central de Abastos y propiedades en Morelos, de hecho fue con ella con quién se comunicaron desde el propio celular del estudiante y otro número más, los cuales fueron geolocalizado en la alcaldía Tlalpan, está y la etiqueta que fue encontrada junto a su cuerpo, con el texto “familia Hernández Guarneros” es la única pista para encontrar a los culpables.
De acuerdo con la Agencia Digital de Innovación Pública (ADIP) capitalina, en la Ciudad de México se han llevado a cabo 81 secuestros entre enero a mayo de este año, es decir, en promedio cada 2 días se comete un secuestro en la entidad.
Sin embargo, con base en el Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal, en promedio, por cada secuestros reportado, 5 no sé denuncian, es decir, que la verdadera cifra es 3 secuestros diariamente en la ciudad.
La alcaldía de Cuauhtémoc es la que posee el primer lugar de denuncias con 16, seguida por Iztapalapa con 13, y en tercer lugar Gustavo A. Madero con 12, estas tres alcaldías poseen el 50% de las denuncias totales que se generan en la capital.
En lo que va del año en 7 colonias de la CDMX ha habido más de un caso de secuestro, las cuales son: Centro (Cuauhtémoc) con 5 carpetas de investigación abiertas, Juan Escutia (Iztapalapa) con 3 casos y Ampliación Casas Alemán (Gustavo A. Madero) Copilco el Bajo (Coyoacán), Industrial Vallejo (Azcapotzalco), Juárez (Cuauhtémoc), Roma Sur (Cuauhtémoc) con 2 denuncias cada una. Al menos otras 63 colonias han sufrido un secuestro en este 2019.
La cifra con el año pasado indica una disminución en el número de carpetas de investigación del 31%, la razón, falta de confianza en las autoridades e impunidad de cuando se denuncian, muchos de los cuales se planean dentro de las cárceles.