Las unidades de transporte público han reforzado sus sistemas de seguridad para evitar robos al interior de camionetas tipo combi y autobuses.
Actualmente más de 10 mil unidades de transporte público cuentan con un kit de seguridad que consiste en cámaras de videovigilancia, botón de pánico y GPS.
El sistema funciona incorporando dos videocámaras de seguridad al interior de los vehículos: una en el área de los pasajeros y otra a un costado del conductor.
Junto al volante del conductor, en la parte frontal de la unidad se encuentra el botón de pánico que envía una señal en caso de un percance. El tiempo de respuesta es de tres minutos.
Una vez que la alerta ha sido recibida por la unidad de monitoreo, se envía un código para que desde el C5 se revisen las cámaras cercanas al lugar en donde se registró el incidente.
Cuando el vehículo ha sido localizado desde la unidad de monitoreo, envían una alerta a las unidades de policía que están en la calle, ellas se acercan a la camioneta o camión de transporte con cautela.
Finalmente, los policías en el centro de control envían un código de detención, pueden comenzar a hacer la revisión.
El costo del kit es de hasta 9 mil pesos, pero hay un subsidio por parte de las autoridades por lo que varias empresas públicas y privadas que operan transporte público se han sumado a la iniciativa instalando el sistemas de seguridad.
Este kit de seguridad además permite que los autobuses sean monitoreados en tiempo real por el Centro de Control y Gestión del Transporte Público y el C5.
Gracias a estos equipos, el rostro de los delincuentes es identificado en las grabaciones ya que las unidades son seguidas esto ha permitido que presuntos asaltantes sean detenidos.
Los autobuses operan con el kit completo en zonas como La Paz, Chicoloapan, Valle de Chalco, Chalco, Ixtapaluca y Texcoco.