El ritmo de trabajo o la falta de organización provocan que salgamos de casa sin desayunar. A veces compramos un café o un sándwich en el camino, y en el peor de los casos hay quienes prefieren esperarse hasta la hora de la comida para ingerir algún alimento.
Algunos también lo hacen como parte de una dieta en la que deben perder peso y una forma de conseguirlo es no ingerir cierta cantidad de calorías durante el día. Pero la realidad es que causa más problemas que beneficios.
Tendrás sueño todo el día
Los nutriólogos afirman que el desayuno es “la comida más importante del día”, y la definen así porque no hay forma de sustituirla. Aunque por la tarde, ingieras alimentos que te hagan sentir “lleno”, es probable que el cansancio permanezca a lo largo de la jornada porque en las primeras horas no adquiriste los nutrientes para que tu organismo hiciera su trabajo.
Pamela Ramos es fisioterapeuta y nutrióloga, comenta que el desayuno debe hacerse sin prisa dedicándole aproximadamente 30 minutos a esta comida. “Con el ritmo de vida de la ciudad a veces es difícil dedicar el tiempo suficiente a preparar un buen desayuno. Pero nunca se debe saltar, una opción es dividirlo en dos e ingerir algún alimento antes de ir al trabajo o a la escuela y luego comer algo más a media mañana para que no pase tanto tiempo con el estómago vacío”, comenta.
“El ayuno prolongado causa que haya más producción de colesterol en la sangre y daña el tejido sanguíneo. En México hay muchos problemas digestivos como colitis o gastritis causados por una mala alimentación”, añade. De acuerdo con la Federación Mexicana de diabetes, en nuestro país, el 90% de los casos están relacionados con sobrepeso y obesidad.
Aumenta el riesgo de enfermedades crónicas
No es una exageración. La falta de alimento en las primeras horas del día puede generar enfermedades que derivan en la diabetes o daños al hígado, esto debido a que los nutrientes regulan los niveles de glucosa y cuando tu cuerpo no los consume por un largo periodo de tiempo, la concentración de insulina disminuye y acumula más azúcar.
Un estudio de la Federación Mexicana de Diabetes indica que las personas que no desayunan tienen más probabilidad de desarrollar sobrepeso u obesidad, que pueden derivar en enfermedades más graves.
Como parte de esto, todo el día sentirás hambre, lo que deriva en un probable aumento de peso y sensación de ansiedad. Además daña tu sistema inmunológico y te hace propenso a enfermarte continuamente, ya que tus defensas no funcionan al cien por ciento.
Menos comida=mayor estrés
El IMSS detalla que la falta de alimento causa mal humor, estrés e irritabilidad, por eso no solo basta ingerir un café y un pan, sino hacer una comida balanceada para que tu cerebro obtenga el suficiente oxígeno y no quieras gritarle a tus compañeros de trabajo ni pelearte con tu familia.
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