Según los expertos en el amor, la principal diferencia entre lujuria y amor es que la primera es una atracción puramente sexual y el segundo es tanto apasionado como compasivo.
De acuerdo con una publicación de Insider, compañía de medios digitales, la lujuria y el amor a menudo se consideran sentimientos distintos, sin embargo, los antropólogos teorizan que existe un espectro que se divide en tres categorías.
- Lujuria: Es el anhelo de satisfacción sexual que impulsa a los seres humanos a buscar parejas sexuales. Es impulsada por un deseo hormonal de gratificación sexual.
- Atracción: Se conoce como amor apasionado y se asocia con sentimientos de excitación y ansias de conexión emocional. Involucra el centro de recompensa del cerebro y puede imitar la sensación de acción a las drogas.
- Apego: Este es conocido como amor de compañía y se caracteriza por sentimientos de calma, unión emocional y seguridad. Esto se da principalmente en las relaciones a largo plazo, incluidas las no románticas.
Alexandra Stockwell, experta en relaciones e intimidad en Alexandra Stockwell Coaching y Consultoría dice que: “La distinción más comúnmente entendida entre la lujuria y el amor es que la lujuria es puramente física y sexual, mientras que el amor incluye el cuidado de alguien que está muy por detrás de su función como fuente de anhelo y gratificación sexual”
En cada categoría se involucran distintas hormonas y sustancias químicas cerebrales que te ayudarán a reconocer los signos de lujuria versus amor.
Amor
El amor se puede dividir en dos: apasionado y compañero.
- Apasionado
El primero es la etapa del enamoramiento y se define como un estado de intenso deseo de estar con otra persona, además la excitación emocional y la pasión sexual son características prominentes de este tipo de amor, de acuerdo con Insider.
Cuando un ser humano se siente atraído hacia otra persona el cerebro produce sustancias químicas para sentirse bien, tales como la dopamina y la norepinefrina, las cuales están relacionadas con el consumo de drogas y el comportamiento adictivo. Por esta razón te sientes tan emocionado y obsesivo durante las primeras etapas de tus relaciones románticas.
- De compañía
Este se caracteriza por fuertes sentimientos de intimidad, afecto y compromiso con otra persona. Este se da principalmente en relaciones amistosas y parejas románticas a largo plazo. Este involucra sustancias químicas cerebrales como oxitocina y vasopresina las cuales están asociadas con el vínculo de pareja.
De acuerdo con un estudio citado por Insider, la oxitocina es significativamente más alta en parejas nuevas en comparación con personas solteras. Durante 6 meses se observaron a distintas parejas y aquellas con niveles más altos de oxitocina al comienzo de su relación tenían más probabilidades de permanecer juntas.
Stockwell asegura que las señales de las que puedes fiarte para saber si estás enamorado son:
- Pensar en contarse cosas interesantes unos a otros.
- Compartes cosas vulnerables y tiernas con la persona con la que estás.
- Emocionarte por conocer a su familia y amigos.
- No te importa la distancia, te sientes seguro con esa persona.
- Manos sudorosas.
- Hinchazón genital.
- Sensación de mariposas en el estómago.
Lujuria
Haley Neidich, psicoterapeuta y experta en relaciones de Haley Neidich Consulting, asegura que: “La lujuria es una atracción puramente sexual que a menudo va acompañada de excitación física. La lujuria se produce tanto en las relaciones amorosas como en el exterior.”
De acuerdo con Stockwell, los síntomas de la lujuria son:
- Si piensas en esa persona inmediatamente tus pensamientos se van a lo sexual.
- Si piensas en esa persona sonríes, te sonrojas y te excitas.
- En cuanto se ven quieren besarse.
- Aunque no tengan mucho en común, en cuanto se tocan eso deja de importar.
- Pasan la mayor parte de su tiempo teniendo relaciones sexuales y cuando hacen otra actividad no les resulta interesante.
- Sin planes a futuro.
- Sus valores son diferentes.
“La lujuria es un sentimiento intenso que domina nuestros pensamientos y puede llevarnos a hacer cosas en contra de nuestro mejor juicio para satisfacer el anhelo”, dice Stockwell.
Estos sentimientos los controla el hipotálamo del cerebro, lo cual estimula la producción de hormonas sexuales testosterona y estrógeno.
Según Neidich, la lujuria sí puede convertirse en amor, pero no garantiza una relación amorosa eventual: “A veces, la lujuria puede conducir al amor y, a menudo, se experimenta dentro de una relación amorosa. Sin embargo, la presencia de la lujuria no dice absolutamente nada sobre la compatibilidad de la pareja a largo plazo”.
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