Comparado con el salario promedio en México (7 mil 300 pesos mensuales), el sueldo que reciben los políticos en cargos públicos de alto nivel es bastante elevado, pues hay algunos que pueden rebasar los 100 mil pesos mensuales.
Esta situación ocurre en casi todo el mundo y la explicación más aceptada sobre por qué ocurre esto es por el nivel de compromiso y responsabilidad que los funcionarios públicos deben dedicarle a su cargo.
Asimismo, en algunos países se considera que un sueldo competente en la administración pública puede disuadir a los políticos de cometer actos de corrupción.
Por ejemplo, existe algo llamado “el triángulo del fraude“, que explica que una persona en un puesto de confianza (ya sea en una empresa privada o en el gobierno) tiene más posibilidades de cometer actos de corrupción cuando está bajo presión financiera.
Por tanto, al pagar un salario considerado como “alto”, esta persona quedaría a salvo de la presión financiera, reduciendo así el riesgo de que cometa un fraude o acto de corrupción.
Otro factor que influye en la designación de sueldos en el gobierno es la competitividad, pues en el sector privado, personas con formación académica destacada que ocupan puestos de alta responsabilidad pueden llegar a ganar dos o tres veces más que un funcionario en puestos equiparables en la administración pública.
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