En Saltillo, Coahuila, una menor de edad llegó la madruga del miércoles a la Cruz Roja aparentemente por un dolor de estómago.
La niña de 13 años, identificada como América, estaba acompañada por su abuela, quien le indicó al personal que su nieta “se sentía muy mal”.
En ese momento la niña se sintió peor, por lo que se dirigió al sanitario del lugar, donde sorpresivamente dio a luz a un bebé.
De acuerdo con las declaraciones, América y su abuela se asustaron ante el alumbramiento porque, supuestamente, desconocían que la niña estaba embarazada. El parto ocurrió minutos después de las cinco de la mañana.
El bebé y la madre fueron revisados por un médico que ordenó su traslado al Hospital General. Además, estuvieron asistidos por enfermeras de la institución.
Cerca de las seis de la mañana, ambos ingresaron al hospital donde nuevamente fueron valorados por doctores, quienes reportaron que la mamá y el bebé están bien.
Por su parte, elementos de la Procuraduría para los Niños, las Niñas y la Familia arribó al hospital para llevar el seguimiento del caso y poder determinar la paternidad del recién nacido.
Otro acontecimiento de una menor de edad embarazada se registró el pasado 18 de julio en Zoquitlán Guerrero.
Una joven de 17 años, integrante de la comunidad me´phaa dio a luz en su casa, donde se encontraba sola debido a que sus padres se estaban trabajando en el campo y a ella no le dio tiempo de acudir al centro de salud.
Ante esta situación, la mujer parió a una niña, pero por la falta de experiencia jaló el cordón umbilical para separarla, lo que le provocó una hemorragia.
Sus familiares que la encontraron, la auxiliaron y llevaron a diversas unidades de salud, sin embargo, ninguna la atendió.
Fue hasta que llegaron al Hospital de la Madre y el Niño Guerrerense que la madre y el bebé fueron internados para ser auxiliados, pero a falta de la atención médica oportuna ambos fallecieron.