En Zacatecas, Rocío García busca a su nieto Edwin Zaid, de un año y medio de edad, quien desapareció el pasado 2 de julio.
La mujer acusa a las autoridades del Sistema de Desarrollo Integral de la Familia (DIF) de Jalapa de haber entregado al menor a una familia ajena en lugar de a su propia familia. Por ello, tras una serie de diversos trámites se reactivó la Alerta Amber para intensificar los trabajos de búsqueda del pequeño.
De acuerdo con una publicación realizada por El Universal, la abuela pidió apoyo y asesoría legal a colectivos feministas. El caso se dio a conocer públicamente tras el argumento de que se trata “de una familia en situación vulnerable y por un trámite ilegal de adopción”.
De acuerdo con el registro de los hechos realizado por los grupos de mujeres, que encabeza la activista Mara Muñoz, el 19 de marzo Edwin se encontraba bajo el cuidado de su abuela materna en el municipio de Jerez, pero su madre se lo llevó a Jalapa, lugar donde reside.
El 2 de mayo, una persona abusando del lazo de confianza que había creado con la progenitora del pequeño y de la situación de vulnerabilidad, le pidió prestado al niño, pero a los pocos días prohibió a la madre ver a su hijo y sólo le informaba que se encontraba bien.
La abuela relata que, tras no tener noticias de su nieto, el 31 de mayo viajó hasta Jalapa pasa saber de su paradero. Después de presionar a la persona que se lo llevó, ésta comentó que había entregado a Edwin a la Procuraduría de Protección a Niñas, Niños y Adolescentes en mencionado municipio.
Por lo anterior, Rocío García acudió al DIF; ahí se le confirmó que el menor estaba en esa institución, sin embargo, no le quisieron dar información de él por lo cual recurrió al Ministerio Público donde le sugirieron dar Edwin en adopción, pero ella no accedió.
Ante estos hechos, la madre y abuela del pequeño fueron en busca del delegado de la Procuraduría de Protección a Niñas y Niños, Germán Lizalde, quién les dijo que el niño se encontraba bajo el cuidado de una pareja a quienes se lo entregaron de manera provisional mientras aparecía algún familiar.
No obstante, al no recibir ayuda de las autoridades, la abuela continuó narrando que recurrió a la Comisión Estatal de Derechos Humanos, donde declaró que sólo registraron su visita, pero no levantaron queja. También pidió apoyo en el Centro de Justicia para las Mujeres de Zacatecas, ahí la canalizaron a la instancia estatal de la Procuraduría, pero recalca que en ningún lado tuvo una respuesta.
Por su parte, Mara Muñoz considera que todos los recorridos que ha realizado la abuela de Edwin sin respuesta son un tipo de violencia institucional ya que nadie la ha ayudado y hasta la fecha el menor sigue desparecido.
Agregó que la Procuraduría antes de haber puesto al menor bajo el resguardo de una familia ajena, primero tenía que haber buscado a sus familiares, empezando por los abuelos a quienes deberían haber realizado estudios para conocer si se podían hacer cargo del niño. Recordó que, “sólo en caso de que la familia cercana no se apta para cuidar al menor, la Procuraduría Estatal debe abrir un proceso de adopción”.
Y también Muñoz mencionó que la Alerta Amber de Edwin fue activada el 3 de julio, luego de que Rocío García realizara la denuncia por la desaparición de su nieto.
No obstante, la pareja que tiene al menor se amparó contra mencionado documento, por lo cual un juez de distrito determinó suspender temporalmente la alerta.
Pero el 31 de julio, una jueza dio negativa ante mencionada suspensión y fue como el pasado 7 de septiembre se reactivó. Hasta el momento, Edwin sigue sin ser localizado.
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