Comerciantes provenientes de República Popular China expanden sus negocios en la Ciudad de México. Durante el sexenio de Claudia Sheinbaum–Martí Batres, empresarios chinos ganaron miles de millones de pesos en licitaciones con el gobierno capitalino. Asimismo, por toda la CDMX, se abrieron de forma irregular cientos de negocios y bodegas de mercancía ilegal o pirata manejados por ciudadanos de ese país.
La recién clausurada “Plaza de los Chinos”, ubicada en el edificio de Izazaga 89, es apenas una de las decenas de bodegas que hay en el centro de la CDMX. Ni siquiera el Gobierno de la Ciudad de México sabe con precisión cuántos de estos negocios operan en la zona.
Cuestionados vía transparencia, en reportajes y en conferencias de prensa, ni la Secretaría de Desarrollo Económico de la Ciudad de México, o la Autoridad del Centro Histórico, el Instituto de Verificación Administrativa (INVEA), ni siquiera el Jefe de Gobierno pueden dar una respuesta de qué tan grande es la red de comercios chinos la zona cercana al Zócalo o en todo el territorio de la capital.
Por ejemplo, el 17 de junio, en una conferencia de prensa se le preguntó a Martí Batres sobre si el gobierno de la ciudad sabía cuántas de estas bodegas existen en la CDMX. La respuesta fue:
“Eso lo vamos a tener que tratar en otro momento para que podamos reunir la información, porque es una información, digamos que, multidisciplinaria. Abarca varios temas, lo que tú comentas, una parte que es comercial, otra parte que es penal, otra parte que es social. Entonces, vamos a reunir a las áreas para tener información al respecto y ya podemos informar mejor”.
En movilidad, empresas chinas son las mayores proveedoras del Gobierno de la Ciudad de México
En el ámbito legal, empresas chinas son las mayores proveedoras de unidades y servicios de transporte público para la Ciudad de México. Entre 2018 y 2024, se han otorgado a negocios de ese país más de 40 mil millones de pesos en licitaciones para la renovación de la Línea 1 del Metro; adquisición de vehículos eléctricos para los sistemas RTP, Metrobús, Trolebús, Trolebús Elevado y Tren Ligero.
Algunas de las empresas que lograron obtener los contratos más grandes en el gobierno de Claudia Sheinbaum–Martí Batres son:
- CRRC Zhuzhou Locomotive
- Monto: 37 mil millones de pesos.
- Concepto: Modernización de la Línea 1 Metro y adquisición de 29 trenes.
- CRRC Corporation Limited
- Monto: 600 millones de pesos.
- Concepto. 9 unidades para el sistema Tren Ligero.
- Yutong
- Monto: 3 mil 237 millones de pesos.
- Concepto: 301 unidades eléctricas para el sistema Trolebús y 170 para el sistema RTP.
- Zhongtong
- Monto: 108 millones de pesos.
- Concepto. 43 unidades para el sistema Trolebús Elevado.
Asimismo, existen decenas de contratos a esas mismas empresas por montos superiores a los 2 millones de pesos por conceptos de refacciones y servicios de mantenimiento a las unidades.
Contrabando chino “invade” la Ciudad de México
En cuanto al mercado irregular, no se sabe con claridad qué tan grande es el impacto de los locales y bodegas de productos chinos en la Ciudad de México. Una investigación del periódico Reforma logró identificar al menos 17 edificios en la zona centro de la capital en los que se vende mercancía que entra al país como contrabando.
Los principales productos que entran al país para ser vendidos en las llamadas “plazas de los chinos” son zapatos; ropa; papelería; juguetes; artículos para el hogar; maquillaje; bicicletas y patines eléctricos; accesorios para celulares; herramientas; y muebles.
Comerciantes del Centro Histórico han denunciado desplazamientos y cierres de negocios locales a causa de las tiendas de productos chinos, pues este tipo de mercancía suele ser mucho más barata, debido a que no pagan impuestos y por ser, mayormente, pirata.
En varias alcaldías de la Ciudad de México también se abrieron decenas de bodegas de artículos chinos, especialmente en zonas cercanas a los edificios de gobierno de las demarcaciones, paraderos altamente concurridos, estaciones de Metro y mercados.
En Azcapotzalco, Cuajimalpa, Miguel Hidalgo, Iztapalapa, Iztacalco, Gustavo A. Madero, Tlalpan, Coyoacán, Venustiano Carranza o Cuauhtémoc, se abrieron grandes almacenes en edificios que solían ser plazas comerciales, centros de oficinas o tiendas que dejaron de operar, como Viana o FAMSA.
Muchos de estos negocios comenzaron a operar en medio de la pandemia de Covid-19 y se convirtieron en distribuidores y mayoristas para emprendedores y pequeños comercios de la CDMX.
Sus productos ahora abarrotan pequeños negocios de ropa, mercados, tianguis, papelerías y hasta locales en plazas comerciales y estaciones del Tren Suburbano.
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