Cuauhtémoc Blanco dejó de ser gobernador de Morelos para buscar ser diputado federal plurinominal de Morena. De esta forma, cierra un ciclo de cinco años de escándalos al frente del estado, especialmente por el incremento en la violencia en la entidad durante su mandato y supuestos nexos con el crimen organizado.
En 2018, Cuauhtémoc Blanco fue electo gobernador de Morelos postulad por el Partido Encuentro Social (PES), en alianza con Morena y PT. Obtuvo más del 50% de los votos.
Su gobierno no comenzó ni terminó de la mejor manera. Desde el inicio, su capacidad para gestionar la administración estatal fue puesta en duda debido a la falta de experiencia y a que sus resultados como alcalde de Cuernavaca tampoco habían sido destacados.
Aumento de la violencia en el gobierno de Cuauhtémoc Blanco
En su primer año como gobernador del estado, los índices de violencia en Morelos comenzaron a subir en rubros como el homicidio, feminicidio, secuestro y extorsión, datos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana y del Observatorio Nacional Ciudadano reportaron aumentos de hasta 100% en algunos de estos crímenes.
A pesar de que la inseguridad fue en aumento cada año, Cuauhtémoc Blanco siguió recibiendo el apoyo del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien lo respaldó en cada visita a Morelos, ante los constantes abucheos que recibía el gobernador por parte de los habitantes.
En 2021, el también exfubtolista reconoció que había una crisis de seguridad en el estado y confirmó una guerra entre grupos criminales que operaban en la región: “(La violencia) ha estado subiendo a raíz de la detención de La Patrona, que controlaba esa zona. Se están peleando la zona, acuérdense que hay dos personajes ‘El Señorón’ y ‘El Maya’ y pues la detención de La Patrona está haciendo que estos grupos se muevan a estos municipios”, señaló a principios de diciembre de ese año.
Aun así, una semana después de dar a conocer esa información, solicito un periodo de vacaciones para descansar, lo que le trajo muchas críticas por parte de la población.
Apenas regresó de su descanso, y las fuerzas de seguridad de Morelos sufrieron uno de los peores momentos de su gestión. Agentes de la policía estatal fueron secuestrados la tarde del miércoles 19 de enero de 2022 y utilizados para hacer un intercambio con las autoridades, en el que cuatro presuntos delincuentes fueron liberados.
Presunta relación con el crimen organizado
También en 2022, el periódico “El Sol de México” difundió una fotografía en la que aparece Cuauhtémoc Blanco junto a tres presuntos líderes del narcotráfico en la entidad (Raymundo Isidro Castro, miembro del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG); Irving Eduardo Solano Vera, líder de Guerreros Unidos y CJNG; y Homero Figueroa Meza, del Comando Tlahuica).
El entonces gobernador aseguró en una entrevista que “le piden muchísimas fotos” y “no va a preguntar a qué se dedican”, sin embargo, las polémicas surgen a raíz de que esta fotografía supuestamente fue tomada en el domicilio del mandatario en 2019.
Semanas después, una investigación hecha por el periodista Drazen Jorgic para la agencia Reuters, hizo cuestionamientos a la riqueza de Blanco y la de sus hijos. También dio a conocer la mala relación que tenía con el fiscal Uriel Carmona y supuestos nexos con líderes criminales.
En septiembre de 2022, el grupo de piratas informáticos Guacamaya Leaks, filtró documentos clasificados del ejército mexicano. Entre ellos se encontraba un informe de inteligencia de la Marina de febrero de 2019, que afirmaba que era posible que Blanco estuviera “en convivencia” con la pandilla Comando Tlahuica y su supuesto jefe, Figueroa.
Otro documento, un memorando del Ejército Mexicano de mayo de 2019, hacía referencia a los otros dos presuntos narcotraficantes que se muestran en la foto que se dio a conocer a principios de ese año.
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