Recientemente se exhibió que el pasado 08 de mayo del 2008 se constituyeron distintas empresas en una notaría en Ciudad Guzmán, Jalisco, las cuales recibieron al menos 2 mil 500 millones de pesos de manos de la Secretaría de Marina escudándose en dos de los proyectos más grandes del gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
El día de ayer, Peniley Ramírez (reportera de investigación y columnista de Reforma) publicó su columna “Fantasmas en Islas Marías”, en esta se expone a un grupo de empresas fantasmas que se vieron beneficiadas con millones de pesos. Los dueños de la mayoría de estas empresas (legalmente constituidas ante notario) son amas de casa, electricistas y empleados comúnes. Las direcciones que corresponden a los accionistas son de algunas casas pobres ubicadas en Ciudad Mante, en el estado de Tamaulipas.
El grupo empresarial conformado por Ga-Castel Construcciones, Grupo Alcaim, Ingeniería Proyectos, Constructor Bandarez, Alta Ingeniería Civil, y Construcciones IPC ganó más de 2 mil 500 millones de pesos gracias a la secretaría de Marina, todo entre los años 2021 y 2022. Cada una de las empresas tienen direcciones y apoderados en común. Las fachadas de las empresas que han ganado millones se encuentran en mal estado o simplemente son terrenos baldíos o apartamentos ubicados en edificios a punto de venirse abajo.
Lo que más llama la atención, dice la periodista, es que todas participaron en concursos de invitaciones a tres compañías y adjudicaciones directas, ganándolo todo. Los contratos ganados fueron para dos de los proyectos más grandes del actual gobierno y que más promoción ha tenido por parte del presidente Andrés Manuel López Obrador: la conversión de Islas Marías en un destino turístico y la construcción de infraestructura en Dos Bocas.
Hay más contratos registrados en las páginas de transparencia, que suman más de 2,500 millones de pesos de negocios con la Marina y este grupo en los últimos dos años. La Marina no ha respondido.
Pueden leer la #Linotipia completa aquí, vía @Reforma https://t.co/rVicWHweNL
— Peniley Ramírez 🥑 (@penileyramirez) September 3, 2022
De acuerdo con la investigación de Ramírez, las páginas de “transparencia” del actual gobierno no son de mucha ayuda, ya que los enlaces a las copias de los contratos están rotos y los registros de licitación aparecen con leyendas como “no disponibles”.
La investigación de la periodista tuvo muchas trabas, ya que la información incompleta y los nulos registros de las contrataciones impidieron llegar al centro del problema, sin embargo, ella realizó un cruce de información con los pocos datos disponibles teniendo como conclusión lo antes mencionado. Descubrió que ninguna de las empresas del conocido grupo tiene datos como páginas web o teléfonos de contacto y los que sí lo tenían no respondían los llamados. Ramírez se dio a la tarea de localizar al abogado, dueños y apoderados que son los representantes legales, sin embargo, no tuvo éxito con ninguno.
Algo “singular” que la periodista encontró es que los socios de estas empresas, entre julio y agosto del 2019, inyectaron más de 600 millones de pesos en “capital social” a las compañías, lo cual significa que invirtieron esta fuerte cantidad en efectivo a sus cuentas, “como si tuvieran ganancias y fueran corporaciones exitosas”; señala Ramírez; después de este sospechoso movimiento, las empresas ganaron los contratos con la Secretaría de Marina.
Luis Pérez de Acha, abogado especialista en lavado de dinero y empresas fantasma, en una conversación con Peniley Ramírez, le dijo: “Es una operación muy inusual, como si quisieran capitalizarlas para cumplir algún requisito de una licitación o como si quisieran poner dinero en efectivo, del que no sabemos su origen, que luego se va a compensar con el dinero que van a cobrar del gobierno”.
Al respecto la Marina no ha emitido comentario con respecto a las acusaciones y no ha dado explicaciones de las transacciones millonarias a empresas fantasma.
No es la primera vez que la Marina es acusada de un movimiento de estas características ya que hace unos años, el Servicio de Administración Tributaria (SAT), reveló que esta secretaría había destinado más de 215 millones de pesos a 43 empresas entre enero del 2014 y mayo del 2019.
Mañana en la #Linotipia en @Reforma, la historia de un grupo de empresas, 2,500 millones de pesos en contratos vigentes para construir Dos Bocas e Islas Marías, y algunos "empresarios" que en realidad son electricistas, amas de casa, empleados…
Nos leemos en la mañana 🤓— Peniley Ramírez 🥑 (@penileyramirez) September 3, 2022
El SAT las catalogó como empresas que facturan operaciones simuladas y que emitieron 3 mil 242 comprobantes fiscales, los cuales usaron para justificar una diversidad de bienes y servicios. En su momento la Secretaría de Marina no aplicó ninguna sanción en contra de los servidores públicos que contrataron a estas empresas y se señaló como supuesto sospechoso a José Rafael Ojeda Durán, quien fue contralor general naval y quien es el actual secretario de la secretaría.
Recientemente la Cámara de Diputados de México aprobó una reforma legislativa, que fue impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, la cual transfiere la Guardia Nacional a la secretaría de la Defensa Nacional, esta decisión contrarresta la postura que durante años el presidente tuvo, de que los militares deberían permanecer en sus cuarteles. Ahora la reforma pasará a discusión del Senado para su aprobación final.
Por otro lado la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), se ha convertido en una de las constructoras más poderosas de México, teniendo a su carga muchas obras gubernamentales. Sin embargo, en al menos 17 obras militares y civiles de la secretaría se ha revelado que contrataron a empresas fantasma y a empresas que no cumplen con los requisitos legales. Entre el 2007 y 2018, SEDENA se encargó de realizar al menos 851 obras encargadas por dependencias gubernamentales en los que destinaron al menos 46 mil millones de dólares a proveedores de bienes y servicios que presentaban irregularidades.
En los últimos años el Ejército ha presentado un incremento sin precedentes en negocios de construcción y seguridad, el poder está cambiando de manos.
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