Más de seis millones de adolescentes y jóvenes en nuestro viven deprimidos. No es de extrañarse, en términos generales, 15 de cada 100 mexicanos lo están, de acuerdo con la UNAM. Los riesgos de no saber cómo detectarla pueden ser mortales.
Y es que la depresión no es un estado anímico como la tristeza o el enojo, es una enfermedad reconocida como tal por la Organización Mundial de la Salud y que tiene terribles consecuencias para quien la padece, incluso para la gente que lo rodea.
Una persona con depresión no tiene necesariamente que estar triste o llorar todo el día. En muchos casos, el problema es casi imperceptible para las otras personas, es más, mucha gente ni siquiera sabe que la padece y la confunden con una etapa o un sentimiento pasajero.
Causas de la depresión
Clínicamente, las causas de la depresión son principalmente derivadas de situaciones emocionales y sociales por las que atraviesa el paciente, además de conductas relacionadas con adicciones.
La Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, al igual que la Asociación Kids Health señalan que algunas de las posibilidades más recurrentes que generan depresión son:
- Estilo de vida familiar
Al tratarse de una enfermedad, por muchos años se ha debatido la idea de que la depresión se hereda de padres a hijos, sin embargo, no hay una respuesta concreta al respecto. Lo que sí se sabe es que si un miembro de la familia la padece, puede transmitirla a otros seres cercanos por medio de sus actitudes y acciones.
Por ejemplo, un adolescente que se siente miserable a pesar de que sus padres hacen todo lo posible para que sea feliz, puede transmitirle la depresión mediante el rechazo a estas acciones, lo cual hará que los papás se sientan infelices por no poder ayudarlo.
- Adicciones
El abuso del alcohol y las drogas son una causa recurrente de esta enfermedad. Los problemas derivados de esta adicción, como efectos nocivos en la salud, recurrente falta de dinero por satisfacer la necesidad de consumirlos y destrucción del entorno familiar y social incrementan los riesgos de sufrir depresión.
- Situaciones estresantes
Perder el empleo, terminar una relación sentimental, perder un familiar o sufrir de bullying escolar entran en esta categoría, al igual que la falta de dinero o la impotencia para realizar alguna actividad. Cuando una persona se siente miserable o infeliz con su estilo de vida no suele buscar soluciones por sí mismo y es necesario buscar ayuda profesional.
- Problemas de salud
Algunas condiciones médicas están acompañadas de lapsos depresivos, por ejemplo, la menopausia en las mujeres o la disfunción eréctil en los hombres son casos muy explicativos.
Pacientes con cáncer, diabetes, esclerosis Alzheimer o VIH también experimentan episodios depresivos. Además, si se suman los tratamientos a largo plazo, invasivos o dolorosos, los episodios pueden incrementar.
Señales de depresión
Como ya se dijo, estar triste no es lo mismo que estar deprimido. La tristeza es solo uno de tantos síntomas que pueden, o no, ser evidentes en un paciente.
El Instituto Mexicano del Seguro Social y la Secretaría de Salud indican que algunas de las señales perceptibles de una persona deprimida son:
- Bajo estado de ánimo, como sentimiento de tristeza.
- Sentir cansancio o agotamiento.
- Llanto, puede ser espontáneo o sin aparente causa.
- Pérdida de satisfacción por realizar actividades que le gustaban.
- Pensamientos negativos hacia sí mismo
- Alteraciones en el sueño, apetito, la concentración y memoria.
- Bajo rendimiento en la escuela o trabajo
- Sentimientos de desesperanza y/o pesimismo
- Sentimientos de culpa, inutilidad, y/o impotencia
- Irritabilidad, inquietud
- Pérdida de interés en las relaciones afectivas o sexuales
- Dolores constantes de cabeza
- Malestares digestivos que no paran
- Pensamientos suicidas o intentos de suicidio
Qué hacer si conozco a alguien con depresión
Dependiendo del número y de la intensidad de los síntomas antes mencionados, la depresión puede clasificarse como leve, moderada y grave, en donde el peor de los casos puede culminar en el suicidio.
Por ello es importante que al tener sospechas de un caso de depresión se le auxilie inmediatamente y se le canalice con expertos, ya sea por la vía privada o de servicios de salud públicos.
También, las personas que detecten que padecen esta enfermedad y busquen ayuda deben saber que hay unidades especializadas en apoyarlos las 24 horas del día.
La mayoría de gobiernos estatales disponen de servicios gratuitos para dar terapias y tratamientos a los pacientes con depresión en los Centros de Salud, Clínicas y Hospitales Públicos.
Algunos números que pueden brindar ayuda telefónica son:
- Secretaria de Salud de la Ciudad de México: 51320909
- Servicio de Orientación Psicológica del Edomex: 800 710 24 96; 800 221 31 09; 722 212 05 32 y 722 280 23 24.
- Locatel: 5668 1111 en la Ciudad de México; o al *1111 del resto del país
Finalmente, algunas consideraciones que el Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía recomienda tener en cuenta sobre la depresión son:
- La depresión es una enfermedad.
- Es tratable.
- Existen personas capacitadas profesionalmente para ayudarlo.
- No basta con “echarle ganas”.
- No le da solamente a las mujeres o niños.
- No es exclusiva de un nivel económico o social, tampoco de una raza en particular.
- La depresión no equivale a tristeza, sino a una baja en el funcionamiento general del individuo.