Cuatro hombres entraron a una casa de la colonia Monte Horeb, en Nuevo León y robaron 164 mil pesos en efectivo. Los sujetos iban vestidos como empleados de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Los habitantes de la casa señalaron a la policía que todo ocurrió el miércoles 11 de diciembre, a las 11:00 de la mañana, aproximadamente. dejaron pasar a los ladrones, quienes les pidieron revisar el medidor de luz.
Una vez dentro, uno de los delincuentes sacó una pistola y amenazó de muerte a la familia. Lo primero que robaron fueron los celulares de las personas que se encontraban en ese momento en el domicilio.
Luego revisaron un bolso donde hallaron 8 mil pesos y en una habitación encontraron otros 6 mil pesos. Los ladrones inspeccionaron la casa hasta que dieron con una caja fuerte y de ahí extrajeron otros 150 mil pesos.
Antes de irse, los asaltantes también se llevaron el CPU que controlaba las cámaras de seguridad de la casa, por lo que las grabaciones con la evidencia más importante se perdieron.
Este tipo de robos ocurren en todo el país, se han documentado casos en la Ciudad de México, San Luis Potosí, Estado de México, Morelos, Querétaro, entre otros. El modo operandis es el mismo:
En general, serán dos o más personas que se caracterizan como empleados de CFE, portan botas, cascos y chamarras con logotipos de la paraestatal y las principales zonas en donde llevan a cabo sus delitos es en colonias de alto poder adquisitivo.
Argumentan que deben hacer una revisión a los registros de los medidores de luz para poder ingresar al domicilio y una vez en el interior someten a los habitantes.
En el Valle de México también se ha identificado a ladrones disfrazados como empleados de Telmex, Sacmex o de compañías de cable e internet.
Las medidas de seguridad para prevenir este tipo de delitos es no permitir la entrada a cualquier persona desconocida.
En caso de que sean empleados de algún servicio que soliciten hacer cualquier tipo de revisión, es necesario exigir que se identifiquen plenamente y que expliquen cuál es el motivo exacto por el que planean entrar.
Antes de darles acceso, solicita un número de teléfono de la empresa en donde puedan brindar más información sobre el trabajo que se supone piensan hacer y si existe una manera de verificar que los sujetos realmente son empleados.
En caso de que los supuestos trabajadores no den las razones suficientes o haya motivos para considerar que se trata de un probable asalto, lo mejor es llamar a la policía, explicar lo que sucede y pedir que una patrulla acuda al domicilio a revisar lo que pasa.
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