Jorge Alfredo Romero fue visto por última vez el 11 de octubre. Se reunió con unos amigos del trabajo cerca del Metro General Anaya, y luego subió a un taxi, desde entonces nadie sabía nada de él.
El hombre, de 50 años, era trabajador del Sistema de Transporte Colectivo Metro. Después de 72 horas, su familia lo reportó como desaparecido.
Autoridades locales encontraron su cuerpo en la zona de la Marquesa. Su esposa asegura que él le llamó a las 11 de la noche del viernes para decirle que por haber tomado bebidas alcohólicas abordaría un taxi sobre Calzada de Tlalpan para “llegar sano y salvo a casa”.
Pero esto no ocurrió, horas después, la mujer volvió a recibir una llamada del teléfono de Jorge Alfredo. Pero era el chofer del taxi para decirle que podía recoger a su marido cerca del Metro Constitución de 1917.
Cuarenta minutos después, ella esperó en el Metro pero no llegaron ni su esposo ni el chofer. A las tres de la mañana del sábado, la mujer volvió a llamarle a su marido pero al contestar solo se escuchaba una respiración y después colgaron.
La Fiscalía Especializada en la Búsqueda, Localización o Investigación de Personas Desaparecidas (FIPEDE) elaboró la ficha de rastreo. Ayer las autoridades dijeron a sus familiares que habían encontrado un cuerpo con golpes y lesiones pero que tenía las características de Jorge Alfredo en la zona de la Marquesa.
Luego fue reconocido en un anfiteatro de la Fiscalía del Estado de México. Las autoridades ya abrieron una carpeta de investigación para conocer el móvil del asesinato del trabajador del Metro.