La sepsis también es conocida como el envenenamiento de la sangre y es una de las 20 causas principales de muerte en México, tanto para niños como adultos.
De acuerdo con informes del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), cada año se registran 3 mil 805 muertes a consecuencias de esta enfermedad.
A pesar de ir especializando los medicamentos como vacunas, antibióticos y cuidados intensivos para combatir la sepsis, ésta se mantiene como la principal infección que causa la muerte a nivel mundial.
El National Institute of General Medical Science describe a la sepsis como “una afección médica grave, causada por una respuesta inmunitaria a una infección”. Lo que sucede es que el cuerpo libera ciertas sustancias químicas de protección en la sangre.
Esta materia segregada desencadena una inflamación generalizada, la cual provoca coágulos de sangre y fugas en los vasos sanguíneos. Esto altera a la circulación derivando en que se priva a los órganos de nutrientes y oxígeno; situación que los daña.
Causas
Existen diversos tipos de microbios que pueden causar la sepsis, sin embargo, en muchos de los casos, los médicos no logran detectar el causante.
Esta enfermedad puede ser a consecuencia de procedimientos médicos como la introducción de un tubo en la vena hasta de alguna infección limitada en alguna parte del cuerpo.
¿Quién puede tener sepsis?
La puede presentar cualquier persona. Los bebés, embarazadas, niños, ancianos o pacientes con problemas graves como diabetes, sida, cáncer son los sectores de la población más vulnerables.
Síntomas
Los más comunes son fiebre, respiración rápida, frecuencia cardiaca alterada, salpullido, confusión y desorientación. No obstante, estos síntomas también se presentan en otro tipo de enfermedades, por ello, dicen los especialistas, la sepsis es difícil de diagnosticar.
Diagnóstico
Se determinan los malestares anteriormente mencionados, pero también se pueden realizar exámenes sanguíneos para detectar anormalidades en la cantidad de glóbulos blancos o si hay presencia de microorganismos infecciosos.
Tratamiento
Las personas con sepsis son tratados en las unidades de cuidados intensivos, en donde los médicos tratan de combatir la infección preservando los órganos y evitando un descenso de la presión sanguínea.
Los procedimientos suelen incluir la administración de antibióticos. En casos más avanzados, a veces se llega a utilizar un tubo que ayude al paciente a respirar, diálisis o cirugía para extraer la infección. Cabe mencionar, que aún no existe un medicamento específico diseñado para contrarrestar la sepsis.