La Organización Nacional de las Naciones Unidas (ONU) señaló que los últimos cinco años van en camino para convertirse en los más calurosos jamás registrados.
Un informe de United in Science de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) indicó que actualmente se estima que estamos 1.1° centígrados de calor por encima de la época pre-industrial (1850 – 1990) y más 0.2°C que en 2011 a 2015. Esto quiere decir que, según los datos obtenidos, los cuatro años anteriores fueron los más calurosos y no han tenido precedentes.
Julio de 2019 fue declarado como el mes más caluroso de la historia, luego de que varias canículas azotaran a Europa.
La lista sobre las afectaciones es larga y está detallada en el informe emitido por la OMM.
Los expertos aseguran que se está acelerando la subida de las aguas oceánicas (en la última década ha sido de cuatro milímetros por año) debido al gran derretimiento de los polos Norte y Sur, lo cual ha provocado grandes inundaciones.
En 2018, las industrias de petróleo, gas y carbón siguieron creciendo. Por ello, las emisiones con efecto invernadero también presentaron un incremento, lo cual se espera que, durante este 2019 alcance, al menos, el mismo número que el año pasado.
Los científicos también redactan que la concentración de dióxido de carbono alcanzará un nuevo récord a finales de año, con 410 partículas por millón, lo que implica mayor contaminación.
Además, estiman que los esfuerzos para contrarrestar el calentamiento global deben ser multiplicado por cinco, en cada uno de los países, con la finalidad de poder hacer algo por mantener nuestro planeta.
“La brecha nunca fue tan grande entre lo que el mundo quiere lograr y la realidad climática”, se lee en el informe.
Como se señala en una publicación del portal de la ONU, el cambio climático está en todas partes y se estima que las emisiones a nivel mundial están alcanzando niveles jamás antes vistos y al parecer aún no han llegado a su máximo esplendor.
El calentamiento global está provocando que los niveles del mar suban, los arrecifes de coral mueran, haya demasiada contaminación del aire, olas de calor y se presentan riesgos en la seguridad alimentaria, lo cual afecta a la salud, entre muchas otras consecuencias.