Un hombre fue detenido en Michoacán tras una revisión a un camión de pasajeros. Escondía animales en peligro de extinción en cajas de cartón y bolsas.
Tras una denuncia ciudadana, elementos de la Policía Ministerial interceptaron el autobús en el que viajaba el sujeto, esto sobre la carretera Ocozocoautla-Las Choapas.
En la inspección le encontraron primero una caja donde tenía cautivo a un mono araña. Después ubicaron otros contenedores de cartón en donde hallaron un venado, un gato montés y dos guajolotes silvestres. También se hallaron dos ejemplares de pavorreales en una bolsa de lona.
Como era de esperarse, el sujeto que los intentó sacar del estado de Michoacán, no tenía ninguna documentación que acredite su posesión, procedencia ni destino. Por tanto fue arrestado.
Ahora este traficante de animales enfrentará cargos por delitos contra la biodiversidad, las especies rescatadas fueron trasladadas a instalaciones de la Profepa en la ciudad de Tuxtla.
¿Qué pasa con los traficantes de animales y plantas?
Comerciar o cazar animales y plantas silvestres sin autorización es un delito a nivel federal que tiene diversas sanciones, según lo establece el Código Penal Federal, en su artículo 420.
Entre las actividades prohibidas por la ley están traficar, capturar, poseer, transportar, acopiar, introducir al país o extraer del país especies de flora y fauna silvestre o cualquier subproducto derivado de ellos.
Los subproductos pueden ser, en el caso de animales, huevos, pieles, etc., en el caso de las plantas son semillas o retoños.
Las multas económicas alcanzan los 300 mil días de multa. Es decir, que la sanción resultará de la multiplicación del salario mínimo vigente por el número de días mencionados.