El caso de Teresita, la menor de 10 años que fue asesinada por los golpes que le propinó su abuela conmocionó a todos. Usuarios de redes sociales cuestionaron a los vecinos de Santiaguito Coaxustenco por no actuar a tiempo e impedir el maltrato hacia la pequeña.
Sin embargo, este no es el primer caso en el que un niño muere por el maltrato de sus padres o familiares.
En el 2015, al menos 6 de cada 10 niñas, niños y adolescentes de 1 a 14 años experimentaron algún método violento de disciplina, y 1 de cada 2 niños, niñas y adolescentes sufrieron agresiones psicológicas, de acuerdo con la UNICEF.
En nuestro país el castigo corporal, las agresiones psicológicas y otras formas humillantes son muy comunes y se consideran normales y son ampliamente aceptadas, tanto como métodos de disciplina como de interacción cotidiana.
Muchas veces este tipo de violencia viene directamente del hogar y puede provenir de padres, madres, cuidadores y otras figuras de autoridad.
En casos menos graves puede provocar que la violencia se normalice y sea adoptada por niños, niñas y adolescentes como una forma de relacionarse, pero en casos como los que presentamos a continuación pueden derivar en la muerte de los menores.
Casos de niños maltratados
Un niño falleció en Saltillo, Coahuila cuando su padre y su madrastra lo castigaron. Su padre le obligó a comerse su excremento, y luego le dieron leche y caldo de pollo. Al vomitar, el niño broncoaspiró y su cuerpo, que pesaba 10 kilos no resistió. Los tutores primero fueron detenidos pero horas más tarde fueron liberados sin explicación alguna.
Su medio hermano de 4 años contó lo que le habían hecho a Landon Yahir de 8 años. Esto sucedió en octubre de 2018.
En marzo de este año, vecinos de la colonia Mesa de los Hornos, en la alcaldía Tlalpan pidieron auxilio porque se escuchaban gritos de un niño.Al ingresar a un domicilio y encontraron a un menor de seis años maniatado en un cuarto de madera, el cual estaba cerrado con una cadena y un candado. Por este hecho fueron detenidos dos hombres de 22 y 46 años.
Otro caso que indignó al país fue el de Karol Ramón de siete años, quien llegó muerto al sanatorio particular de Juventino Rosas, en Guanajuato el 26 de febrero.
Su cuerpo tenía todo tipo de golpes y cicatrices, y a pesar de que había sido atendido por personal del DIF durante meses para recibir atención psicológica, nunca notaron que el pequeño era maltratado por su madre Margarita y la pareja sentimental de la misma, Esmeralda.
En Tijuana, un niño se estaba convulsionando mientras era trasladado en un taxi al hospital. El chofer del taxi se dio cuenta de lo grave que se encontraba el pequeño y se detuvo en el Libramiento Salvador Rosas Magallón para pedir ayuda a las autoridades.
El menor de 2 años estaba acompañado de un joven de 17 quien dijo que el niño comenzó a vomitar durante el trayecto y que se detuvo para brindarle ayuda, pero que ya no respondía. Cuando los paramédicos llegaron al lugar y revisaron al menor, determinaron ya no tenía signos vitales y descubrieron que tenía marcas de múltiples moretones en el cuerpo. La madre del menor, identificada como Victoria de 27 años, llegó al lugar y dijo a las autoridades que Yahir es su cuñado. Esto sucedió en mayo de este año.
El 1 de mayo una pareja fue detenida por ocasionar la muerte de un niño de siete años, cuyo cuerpo al ser revisado por las autoridades, presentaba golpes y el Síndrome del Menor Maltratado.
México es el país que menos invierte en la primera infancia según señala la organización Save The Children México.
De acuerdo con sus datos, México ocupa el primer lugar de violencia entre los países que integran la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), y en el país mueren tres menores que son víctimas de la violencia cada día.