Usuarios que aún no logran realizar su trámite de reemplacamiento denuncian que personas no autorizadas prometen realizar el trámite en menos tiempo a cambio de un cobro adicional, y piden casi el doble del precio oficial que aparece en la página de internet.
Los sujetos que ofrecen este procedimiento están casi en la entrada de las oficinas gubernamentales. Se acercan a los ciudadanos y los abordan diciendo: “¿Desean que les haga rápidamente su trámite?, les saldrá un poco más caro, pero así se evitarán molestias y malos ratos”.
Mientras tanto, en las oficinas se han colocado mantas que advierten sobre los coyotes ya que ellos no son servidores públicos y otorgarles datos personales podría colocar a los ciudadanos en riesgo.
Las personas de la tercera edad son las más susceptibles de solicitar ayuda de los coyotes, pues están dispuestos a pagar más con tal de ahorrarse las largas filas que a veces implican pasar varias horas formado.
Personas han denunciado que deben esperar entre 5 y 12 horas ya que las oficina de reemplacamiento únicamente entregan fichas para las primeras 400 personas.
Para obtenerlas, solicitan presentar la factura del automóvil, el INE, comprobante de domicilio, placas, tarjeta de circulación y el contrato. De no alcanzar una ficha es necesario volver a formarse.
El costo del trámite por vehículo es de 751 pesos, mil 568 para transporte de carga y 559 en el caso de motocicletas.
Mientras que un coyote cobra mil 200 pesos para autos sin adeudos, 2 mil para autos que no han pagado la tenencia o refrendo y las motos de mil 200 a mil 500.
El riesgo del robo de identidad
Los coyotes que operan afuera de las oficinas de reemplacamiento del Estado de México solicitan documentos para agilizar el trámite y datos como: nombre, teléfono, domicilio, fotografías, huellas dactilares, números de licencia y seguridad social, podrían quedar a disposición de cualquier persona. Al ser personal ajeno las oficinas, los coyotes no protegen los datos confidenciales de los usuarios.
El robo de identidad ocurre cuando una persona obtiene, posee, comparte o usa de manera no autorizada datos personales de alguien más, con la intención de asumir de manera apócrifa su identidad. A menudo, los delincuentes realizan compras, solicitan créditos, documentos o cualquier otro beneficio financiero a nombre de alguien más.
Este delito es relativamente sencillo de realizar, pues las víctimas no se dan cuenta de que ha sucedido ya que no reciben amenazas.
Si detectas que alguien ha hecho mal uso de tu identidad, debes denunciar de inmediato y dar seguimiento para que no te siga afectando.
Debes levantar un acta ante el Ministerio Público e informes a las instituciones a las que pertenecen tus documentos, por ejemplo: IMSS, ISSSTE, INE, Relaciones exteriores, entre otros.
Ponte en contacto con la institución en donde detectaste que tu nombre ha sufrido la afectación para comunicar lo sucedido y procedan para que no abusen más en tu nombre.